La alegría y la fuerza transformadora de la juventud son el motor del cambio social, pero también la razón de ser de nuestra docencia. Es por ello que para mí es muy importante darles la bienvenida a este nuevo ciclo escolar tan sui géneris como los tiempos que nos ha tocado vivir. Juntos habremos de emprender este nuevo reto. Ahora miles de nuestros alumnos podrán regresar a diversas instalaciones de nuestra querida Alma Mater para hacer sus prácticas y reencontrarse con sus maestros en torno al conocimiento y al trato cordial y humano que es lo que nos une.
Soy un convencido de que esta modalidad híbrida entre lo presencial y lo virtual habrá de irse normalizando como parte de las nuevas formas de educar en todo el mundo.
En la Universidad Autónoma de Chihuahua nos sentimos muy orgullosos de que, gracias al esfuerzo de todos, no hemos parado ni un solo ciclo; hicimos frente a la adversidad y entendimos que los tiempos difíciles nos hacen más fuertes, porque a los universitarios nos mueve la pasión y las ganas de echar para adelante.
Bienvenidos, alumnos de nuevo ingreso, siéntanse afortunados de pertenecer a nuestra Universidad, ahora ya son parte de la tercera generación de la Renovación UACh-DS. Este nuevo e innovador modelo educativo, emprendido desde hace ya un año, nos permitirá egresar profesionistas líderes en las diversas áreas del conocimiento global, con una visión más sensible a nuestro entorno, listos para afrontar problemas y solucionarlos con eficacia. Desarrollarán su mente y su sensibilidad para trazar caminos que nos permitan construir un mundo más justo y con respeto a la naturaleza, y así dar cumplimiento a los acuerdos firmados con la Unesco de la llamada Agenda Mundial 2030.
Estudiarán en la UACh para trabajar en el mundo.
Quiero aprovechar para dar un reconocimiento a los integrantes del Comité de Salud que ha velado por nuestra seguridad en todo momento, estableciendo protocolos y haciendo trabajos de coordinación para las arduas jornadas de vacunación, y especial mención merecen los más de 800 alumnos voluntarios de las diversas carreras de salud que estuvieron al pie del cañón y en primera fila, vacunando a miles y miles de chihuahuenses, movidos sólo por su gran vocación de servicio. Todo nuestro respeto y toda nuestra admiración, pero en especial nuestra eterna gratitud.
Sean todos bienvenidos.