La sacudida financiera en los mercados globales, del pasado “Lunes Negro” que arrastró a la baja a las principales bolsas, como el índice Nikkei de la bolsa de Japón, que presentó abruptamente una variación negativa de -12.40 puntos porcentuales y otras bolsas bursátiles de Estados Unidos, que se han convertido en icónicas, cómo son el Índice Nasdaq y el Dow Jones índex, que cayeron, en menor medida, -3.43 y 2.60 puntos, respectivamente. ¿Qué originó estos desequilibrios financieros? Se infiere que esta volatilidad de los mercados obedece al impulso de una serie de factores, entre los que se subrayan: la reacción a una posible postura restrictiva del banco central de Japón, ya que, el alza en la tasa de interés del Banco de Japón, se informó que hizo un alza de alrededor de 0.25% a su tasa de referencia. Es importante comentar que, en opinión de muchos economistas, se presenta un consenso que refiere a que una economía se comporta de manera saludable cuando, los precios no bajan, sino que suben moderadamente, es por eso que los principales bancos centrales de todo el mundo, tienen como objetivo optimo que las economías de los países crezcan en torno a un dos por ciento. Pero en Japón, ha sido de los pocos países que que para evitar que los precios cayeran, ensayaron tipos de interés negativos, pero con este movimiento pone fin al período de deflación, por lo que deja de ser el único país con tasas de interés negativas y da por terminado un período extraordinario en materia de política monetaria; como complemento, habría que comentar que el termino técnico de la deflación refiere a una contracción de la oferta monetaria en una economía, que pueda provocar una caída general de los precios; es decir, lo contrario a la inflación. Pero al parecer esta medida cuya pretensión fue la de impulsar el crecimiento de la economía japonesa, asustó globalmente a los inversionistas.
Por otra parte, también, esta caída de las bolsas de valores de todo el mundo, el pasado 5 de agosto, se debió a la incertidumbre de los inversores, de una posible recesión en Estados Unidos, esto obedeció a que el informe del empleo en este país, al mes de julio, mostró una desaceleración inesperada en el mercado laboral, con una tasa de desempleo que alcanzó un 4.3%. Habría también que comentar que la incertidumbre ocasiona que las decisiones de gasto e inversión de familias y empresas, se posponen, lo que origina una contracción de la actividad económica. Volteando a ver lo que sucede, en estos mismos aspectos económicos, en nuestro país, se puede comentar lo siguiente: en junio del 2024, a nivel nacional, conforme al INEGI, la población desocupada ascendió a 1,682,568 personas, mientras que, al mismo mes de junio, pero del 2023, la población desocupada fue de un total de 1,598,523 personas, es decir que, hubo un ascenso de 84 045 personas desocupadas; en números relativos creció 5.2%. En cuanto a las características de la población ocupada, según su sector de actividad económica, ahí es de llamar la atención que, en junio del 2023, la población ocupada en el sector primario fuera de un total de 6,492,051 personas, y en junio del 2024, es de 6,159,945 personas, esto representa una diferencia de -332,106 personas, esta caída abrupta obedece seguramente a las afectaciones en el sector agropecuario, derivadas de la intensa sequía sufrida en el período. Por su parte, el IMSS difundió el balance de puestos de trabajo afiliados a esa institución, a nivel nacional suman 22 millones 331 mil 788 puestos de trabajo registrados, con 86.6% permanentes y 13.4 eventuales. Para el pasado mes de julio se presento un incremento de 12,344 puestos de trabajo, a tasa mensual de 0.1%.
Posdata. Tasa de interés por país: Estados Unidos entre 5.25% y 5.5%; Banxico 10.75%.
Presidente del Colegio de Economistas de Chihuahua