/ miércoles 4 de diciembre de 2024

Clásico Joven

Hace apenas 6 meses en este mismo espacio, y en la víspera de la final del torneo Clausura 2024 que concluiría en el bicampeonato de las águilas, se redactó una columna acerca de cómo América vs Cruz Azul se ha convertido en la rivalidad más grande de los últimos años, y una vez más, aquí está el destino dándonos la razón. En esta ocasión en la antesala de la semifinal que muy probablemente nos dará al campeón del Apertura 2024. El estadio Ciudad de los Deportes será el anfitrión de este nuevo capítulo tanto para el jueves 5 como para el domingo 8 de diciembre. Hablemos del feudo del momento, hablemos del partido conocido como “Clásico Joven”.


Ambos contextos muy fuertes pero de maneras muy diferentes. Por un lado tenemos a Cruz Azul, que aparte de ser el actual subcampeón y líder general, acaba de otorgarnos uno de los torneos más impactantes que nos ha dado un club en torneos cortos (quizá el más) con 13 partidos ganados, dos empatados y solamente uno perdido, y si bien mostró su peor versión contra Xolos en la ida de estos cuartos de final, la goleada 3-0 del pasado sábado con la que recuperaron el resultado dejó claro que aquello fue solamente un accidente. ¿Por qué puede ganar Cruz Azul? Porque hoy por hoy es el equipo que mejor juega al futbol, tan sencillo como eso.


Y por el otro nos encontramos al Club América, que a pesar de haber estado muy lejos de dar su mejor torneo regular, hasta ahora le ha alcanzado para colarse en la séptima posición de la liguilla y llegar hasta semifinales. Y es que eso es precisamente lo que da miedo de este equipo, si jugando mal ya llegó al Top 4 del torneo ¿que será si mañana se le ocurre empezar a jugar bien? Por lo pronto América ya dio una clara muestra de mejoría al eliminar a Toluca, sublíder general, sin siquiera despeinarse. La arrogante y, hasta hace poco, imposible misión del tricampeonato se ve cada vez más cerca. ¿Por qué puede ganar América? Porque es el club más grande del fútbol mexicano, tan sencillo como eso.


Por lo pronto es inevitable ignorar que el historial está del lado azulcrema, pues de las ocho veces que la liguilla en torneos cortos ha visto un clásico joven, las águilas han resultado victoriosas en siete, incluyendo tres finales (C2013, A2018 y C2024), una semifinal (C2005) y tres cuartos de final (V1998, A2017 y C2019). Seguramente desde el nido se hablará mucho de la paternidad y seguramente desde la noria se hablará mucho de la calidad de juego actual. Lo que sí es totalmente indiscutible es que esta rivalidad va creciendo cada vez más y más (mientras otras van disminuyendo) y que tenemos garantizada una serie de semifinales llena de orgullo, odio, garra y mucho, mucho… morbo.


Mario el Lobo / Tiktok: @la.futboliza