/ miércoles 12 de junio de 2024

Efectos de las elecciones en la economía

Las declaraciones de Sheinbaum sobre el paquete de reformas impulsadas por el presidente López Obrador causaron nerviosismo a los inversionistas, lo que ha llevado en declive a la moneda mexicana. La divisa mexicana se depreció 8.22 por ciento la semana pasada, llegando a 18.39 $/US y ligó tres semanas consecutivas con pérdidas, principalmente por el ruido político interno.

Hay analistas que no descartan que la cotización del peso frente al dólar regrese a las 20 unidades por dólar en los próximos meses. El peso es la quinta moneda más devaluada frente al dólar en lo que va del presente año, el triunfo de Morena incrementó la volatilidad de la divisa.

Economistas extranjeros no descartaron que, si la depreciación de la moneda continúa, los “inversionistas especulativos en Chicago puedan volverse más cautelosos y reducir la demanda de contratos netos en pesos”.

Entre los fundamentos que pueden soportar el valor del peso se encuentran la libre flotación de la moneda, la autonomía del Banco de México, el nivel de las reservas internacionales, y el diferencial de las tasas con Estados Unidos. Desgraciadamente, nos enfrentamos a un gobierno totalitario de facto, ya que todos esos fundamentos pueden ser eliminados con total impunidad. Sobran los ejemplos internacionales.

Lo que llamamos “carro completo” significa que un mismo partido posee el ejecutivo y el legislativo, esto tradicionalmente genera una aversión al riesgo en los mercados, ya que se genera una expectativa de que los contrapesos se diluyen, y en el caso mexicano que padecimos una presidencia que no respetó la ley aun las más básicas, tampoco las económicas, y que pronostica que va a seguir participando en el nuevo gobierno, pues tenemos un temor fundado en que en esta ocasión que las propuestas de Morena sean aprobadas sin excepciones, en particular el Plan C. Esto no sólo será malo para la economía sino para el Estado de Derecho, las instituciones, y la seguridad.

Ante este panorama se ve difícil que llegue todo el potencial del nearshoring, nuevamente la terca incertidumbre. Esto tiene que ver en gran medida la ironía de que a medida que Andrés Manuel López Obrador fortaleció la figura presidencial, debilitó al Estado mexicano, que pierde terreno frente a las reglas de los criminales en diversas zonas del país.

“Un México que está perdiendo su democracia también seguirá perdiendo autoridad frente a los grupos criminales. Para los estadounidenses, la gran pregunta es: ¿cuánta autoridad puede perder el Estado mexicano antes de fracasar por completo?” cuestiona Frum.

Habiendo entrevistado a Claudia Sheinbaum, la describe inteligente, pero atada a los dogmas del actual presidente Andrés Manuel López Obrador.

“Ahora esta poderosa presidencia será ocupada por una protegida en deuda con un predecesor que aspira a controlarlo todo detrás de escena. Y solo recuerden que el sexenio que termina en México, se creció un magro 1.1% en promedio anual.


Maestro en Finanzas. Economista

betortizelias@gmail.com


Las declaraciones de Sheinbaum sobre el paquete de reformas impulsadas por el presidente López Obrador causaron nerviosismo a los inversionistas, lo que ha llevado en declive a la moneda mexicana. La divisa mexicana se depreció 8.22 por ciento la semana pasada, llegando a 18.39 $/US y ligó tres semanas consecutivas con pérdidas, principalmente por el ruido político interno.

Hay analistas que no descartan que la cotización del peso frente al dólar regrese a las 20 unidades por dólar en los próximos meses. El peso es la quinta moneda más devaluada frente al dólar en lo que va del presente año, el triunfo de Morena incrementó la volatilidad de la divisa.

Economistas extranjeros no descartaron que, si la depreciación de la moneda continúa, los “inversionistas especulativos en Chicago puedan volverse más cautelosos y reducir la demanda de contratos netos en pesos”.

Entre los fundamentos que pueden soportar el valor del peso se encuentran la libre flotación de la moneda, la autonomía del Banco de México, el nivel de las reservas internacionales, y el diferencial de las tasas con Estados Unidos. Desgraciadamente, nos enfrentamos a un gobierno totalitario de facto, ya que todos esos fundamentos pueden ser eliminados con total impunidad. Sobran los ejemplos internacionales.

Lo que llamamos “carro completo” significa que un mismo partido posee el ejecutivo y el legislativo, esto tradicionalmente genera una aversión al riesgo en los mercados, ya que se genera una expectativa de que los contrapesos se diluyen, y en el caso mexicano que padecimos una presidencia que no respetó la ley aun las más básicas, tampoco las económicas, y que pronostica que va a seguir participando en el nuevo gobierno, pues tenemos un temor fundado en que en esta ocasión que las propuestas de Morena sean aprobadas sin excepciones, en particular el Plan C. Esto no sólo será malo para la economía sino para el Estado de Derecho, las instituciones, y la seguridad.

Ante este panorama se ve difícil que llegue todo el potencial del nearshoring, nuevamente la terca incertidumbre. Esto tiene que ver en gran medida la ironía de que a medida que Andrés Manuel López Obrador fortaleció la figura presidencial, debilitó al Estado mexicano, que pierde terreno frente a las reglas de los criminales en diversas zonas del país.

“Un México que está perdiendo su democracia también seguirá perdiendo autoridad frente a los grupos criminales. Para los estadounidenses, la gran pregunta es: ¿cuánta autoridad puede perder el Estado mexicano antes de fracasar por completo?” cuestiona Frum.

Habiendo entrevistado a Claudia Sheinbaum, la describe inteligente, pero atada a los dogmas del actual presidente Andrés Manuel López Obrador.

“Ahora esta poderosa presidencia será ocupada por una protegida en deuda con un predecesor que aspira a controlarlo todo detrás de escena. Y solo recuerden que el sexenio que termina en México, se creció un magro 1.1% en promedio anual.


Maestro en Finanzas. Economista

betortizelias@gmail.com