/ lunes 6 de septiembre de 2021

El chihuahuense y su identidad; hacia dónde vamos

Por: Jorge Cruz Camberos


A lo largo de los años, el chihuahuense común, ese que llamamos “de a pie”, no ha tenido claro cuál es su identidad, lo que le caracteriza fuera de la pronunciación de la “ch” como “sh” o de la terminología “chihuahuita”, como nos dicen los juarenses a los capitalinos, incluso posiblemente no sepa cómo lo ven y qué piensan de él en otras regiones del estado y del país.

Me queda claro que somos mucho más que eso, es por ello que en esta ocasión me referiré a algunos puntos esenciales que desde el sector empresarial hemos estado impulsando en la búsqueda de que esa identidad salga a la luz y los mismos chihuahuenses sepamos, y nos creamos, lo que somos y de lo que somos capaces.

Hace unos meses, en la iniciativa privada decidimos ir de la mano con el Municipio de Chihuahua y el Consejo de Desarrollo Regional de Chihuahua (Coder), para contratar un despacho de probada experiencia en la elaboración de una estrategia para fortalecer la Marca Chihuahua.

Algo importante a destacar es que, aunque vamos de la mano empresarios y gobierno, el proyecto es liderado por ciudadanos vinculados a nuestro sector en la búsqueda evidente de resultados ciudadanizados que vayan más allá de los cambios de administraciones de gobierno.

Y lo digo así porque lo que queremos es, paso a paso, ir generando marca local y que cada nueva administración haga crecer lo que ya tenemos y lo que iremos logrando en el futuro inmediato. Asimismo, los empresarios creemos que es importante comprender cómo podemos elaborar una estrategia con mayor impacto y sentido de pertenencia e identidad de nuestra sociedad.

De esta forma, nuestro objetivo central se convierte en volver más atractiva nuestra localidad, en cómo le hacemos para que la gente foránea quiera venir a estudiar, a trabajar, a formar una familia, a desarrollarse profesionalmente y, por qué no, a invertir.

Para lograrlo, es importante profundizar en las distintas dinámicas de los ciudadanos, analizar en el imaginario interno y externo de la ciudad, en sus distintas aristas, a la gente, la vida pública, los espacios de recreación y la infraestructura, lo que nos dará, sin duda, un claro panorama de lo que podemos y queremos llegar a ser.

Por definición, Chihuahua capital es un territorio racional, que atrae y jala con estrategia, una que narra el presente sin dejar de mirar, de soslayo, el futuro potencial del norte, uno que habla de vinculación como territorio y no de aislamiento.

Los chihuahuenses hemos aceptado las condiciones adversas y extremas de un territorio agreste, una tierra donde se asoma nuestra capacidad de sentirnos activos gracias a nuestro temperamento progresista, que nos hace proyectar indistintamente el crecimiento que necesitamos. Los ciudadanos somos el centro y para entender bien qué es Chihuahua se necesita conocer a su gente.

Es por lo que en nuestros siguientes editoriales hablaremos sobre: ¿Qué es la ciudad de Chihuahua y la identidad de su gente?, ¿cómo se vive?, ¿quiénes convivimos y cómo administramos el bienestar? y ¿qué más podemos ofrecer por nuestra tierra?, todo ello enfocado en generar mayores atractivos en nuestra ciudad que detonen el turismo, local, nacional y hasta internacional.