-Se fortalecen gobiernos autoritarios y populistas
-“Si resuelven mis problemas, no importa cómo lleguen al poder, dice el 54% de los latinos
Durante los últimos 13 años, en México, y, en general, en América Latina, el respaldo a la democracia experimentó un sistemático declive, según el informe 2023 de la corporación Latinobarómetro
Los gobiernos, así como los partidos políticos atraviesan una grave crisis de confianza ciudadana, lo que daña severamente la democracia.
Ante esto, es prioritario el fortalecimiento de las instituciones en el marco del derecho, transparencia y participación activa de los ciudadanos, de lo contrario corremos el riesgo de un retroceso, como ocurre en Venezuela y Nicaragua. Y no se diga en Cuba.
En la crisis democrática, las causas son variables, pero fundamentalmente por: los escasos resultados económicos, la galopante corrupción; la supresión de la libertad de expresión y el empoderamiento de la delincuencia.
Lo anterior ha dado motivo, a la aparición de organismos especializados que le disputan la representación a los gobiernos en temas para los que no ha podido responder eficazmente.
Medios de comunicación independientes, consejos empresariales, iglesias y organismos de la sociedad civil ahora influenciados fuertemente por internet y las redes sociales, principalmente en países con democracia madura, influyen determinantemente como factores de poder en la toma de decisiones de la nación, llamados como el “Quinto Poder” por el periodista Ignacio Ramonet, director del periódico francés Le Mond.
Mauricio Jaramillo Jassir, investigador de la Universidad del Rosario, Colombia, escribe en la revista Desafíos: “ En efecto, la democracia ha dejado de ser el ideal por excelencia de los sistemas políticos, para convertirse en una suerte de mal menor”.
Y agrega: tal ha sido el caso de los totalitarismos descritos por Hannah Arendt (1982), las dictaduras tan presentes en el universo político latinoamericano, empapadas de la paranoica contención del comunismo, y más recientemente, de los autoritarismos competitivos (Levitsky & Way, 2002) y regímenes híbridos (Morlino, 2008). Para todos esos regímenes que tanto daño han causado, la democracia también ha sido una adecuada y efectiva respuesta”.
En este contexto complejo e incluso adverso para la democracia, sobre todo por la proliferación de los autoritarismos, resurge el pensamiento del escritor italiano Giovanni Sartori, uno de los principales referentes sobre la teoría de la democracia y más concretamente sobre la representatividad. Esta última enfrenta una crisis dramática que ha derivado en el fortalecimiento de regímenes, en los que el derrotero se ha vuelto la participación, y en algunos casos, en detrimento de la representatividad.
En muchos países de América Latina está creciendo la población incómoda con la democracia, en promedio el 54% de los latinos dicen que no importa si el gobierno llega al poder sin democracia siempre y cuando resuelva los problemas.
El informe 2023 de Latinobarómetro expone que a un número importante de la población latinoamericana le da lo mismo el tipo de régimen siempre que "solucione los problemas".
En países como Honduras y Guatemala que enfrentan niveles altos de pobreza, violencia y desigualdad son en los que más se apoya esta idea de que no importa si el gobierno no es democrático.
Mientras que en Argentina y Chile, en donde se han vivido dictaduras militares, son en los que la población valora más la democracia.
Y ya que hablamos de democracia, se entiende como el conjunto de reglas que todas las partes se comprometen a respetar. Y que están encaminadas a asegurar la convivencia entre los ciudadanos y permitir la competencia pacífica por el poder.
El próximo 2 de junio, más de 98 millones de mexicanos estamos llamados a las urnas para definir el rumbo del país, en un marco de respeto a los derechos humanos, rechazo a la violencia y a la polarización..