/ jueves 3 de octubre de 2024

La columna 

  • La secesión de Chihuahua: una opción liberal ante la amenaza del totalitarismo.


Llama la atención el posicionamiento que ha hecho recientemente el diputado local y coordinador de los legisladores del Partido Movimiento Ciudadano, Francisco Sánchez Villegas. El legislador parralense propone que Chihuahua se separe de la Federación, como una medida para evitar que los chihuahuenses suframos las consecuencias de la serie de reformas que a iniciativa del expresidente Andrés Manuel López Obrador se comenzaron a llevar a cabo en nuestro país en los últimos días de su sexenio, y que concluirán en el de su sucesora y correligionaria, Claudia Sheinbaum.


Independientemente de la dificultad jurídica, política y material que en este momento pueda representar la iniciativa que propone el diputado Sánchez, su planteamiento tiene por objeto resolver lo que se percibe como un problema real e inminente que pronto habrá de afectarnos a todos los mexicanos. Dicho problema es considerable, pues las reformas al Poder Judicial, la Guardia Nacional y los Organismos Autónomos -desaparición de éstos últimos-, apuntan en modo claro hacia una concentración absoluta del poder y el control de la vida social, en manos de la titular del Poder Ejecutivo y el partido gobernante -MORENA-, así como a una militarización total del país, con el consecuente menoscabo de las libertades democráticas y los derechos fundamentales de todos los mexicanos. Este escenario representa un grave retroceso político, económico y social, que además generaría gran desconfianza y desaliento en los sectores productivos, lo que podría acarrear el desplome de la inversión nacional y extranjera, incluso el cierre de empresas.


No es la primera vez que se propone una secesión e independización de estados respecto a la Federación, para constituir un Estado nacional independiente. Ya en tiempos recientes se había propuesto la alternativa de que varios estados del norte del país siguieran esta ruta para formar un nuevo país, independiente de México.


Más allá de la complejidad legal y política que implica la fundación de un nuevo Estado nacional, debido a la falta de sustento constitucional, así como por el dominio político morenista en el Congreso de la Unión, en los congresos locales y en las gubernaturas de la mayoría de las entidades del país, vale la pena recordar y analizar que el origen de esta discusión es la dificilísima circunstancia en la que hoy se encuentra México, a raíz de la actuación de Andrés Manuel López Obrador, quien dejó el poder destruyendo los cimientos del marco jurídico-político-constitucional del Estado mexicano, así como causando un evidente menoscabo a las libertades, la democracia y el estado de derecho, esto en perjuicio del porvenir de la presente y futuras generaciones de mexicanos.


carloshjaramillovela@yahoo.com

Miembro de la Asociación de Editorialistas de Chihuahua, A.C.