/ lunes 16 de agosto de 2021

Messi

Por Mario Ramírez

@LaFutboliza

@MarioRamirec

Existen días inolvidables en la historia del futbol, acontecimientos que quedan marcados en la eternidad y que será imposible olvidarlos para aquellos que estuvieron vivos en ese momento. Unos sucesos son alegres, llenos de luz y sonrisas mientras que otros son oscuros y tristes repletos de lágrimas, y esta semana terminó por oficializarse uno de los capítulos más negros e inesperados desde que el balón rodó por primera vez. El hijo pródigo abandonó su ciudad, su hogar, su vida… Messi dejó al Barcelona.

Sea del equipo que sea cualquier aficionado, debe admitirse que hubiera sido una hermosa historia el que Lionel Messi se haya retirado en el FC Barcelona. Esta relación debe ir más allá de toda afición y postura. Las palabras “Messi” y “Barcelona” se hicieron sinónimos con el andar de los años, no podías pensar en uno sin pensar en otro, una sinergia que hizo temblar a todo club, jugador y aficionado en un momento u otro alrededor del mundo durante años, una era inolvidable que quedará tatuada para siempre en la mente de amantes y rivales.

Motivos exactos todavía no definidos al 100%, candados salariales por parte de La Liga de España sumándose a la mala administración del club en los últimos años dieron como resultado la despedida de su mejor y más querido jugador. Sean cuales hayan sido las causas, es definitivo que el 10 merecía una despedida más digna, una que hubiera sido por su propia decisión, sonriendo y levantando campeonatos, con el estadio lleno pintado de blaugrana, ovacionando de pie y aplaudiendo, esa armonía que sólo Messi y su afición culé podían lograr.

El argentino continuará su ilustre carrera en la liga francesa con el Paris Saint-Germain, quien probablemente cuenta con el mejor plantel del mundo y con buen rango de diferencia. Mientras que el Barça buscará retomar protagonismo en liga y Champions con la renovación comandada por el recién nombrado presidente Joan Laporta. Como buena película de Hollywood, los amores de vida tomarán caminos separados.

Luce prácticamente imposible que el aficionado culé encuentre un reemplazo para Messi, un hueco que no volverá a ocuparse ni hoy ni nunca, los zapatos de un enano que irónicamente nadie podrá llenar jamás, el jugador que nació y construyó con sus propios pies la mejor época de su escuadra. 778 partidos, 672 goles, 268 asistencias, 10 Ligas Españolas, 7 Copas del Rey, 7 Supercopas de España, 4 Champions League, 3 Supercopas Europeas, 3 Mundiales de Clubes, millones de euros generados y millones de corazones conquistados. Lionel Andrés Messi Cuccittini... simple y sencillamente el mejor jugador en la historia del Fútbol Club Barcelona.