La globalización de los negocios a nivel mundial obliga a las empresas a reformular sus estructuras administrativas, comerciales y productivas para que éstas puedan responder a los requerimientos de sus clientes, en un mercado cada vez más competido.
Hace tres sexenios en nuestro estado dejó de operar el Centro de Desarrollo de Proveedores, organismo descentralizado encargado principalmente de la promoción y vinculación de la proveeduría local, así como del inventario de proveedores, certificaciones y networking, entre otros, mismo que llegó a operar con alrededor de 500 mil pesos anuales, lo que pareciera insuficiente en su momento.
Chihuahua cuenta con una historia de más de 50 años de crecimiento y desarrollo industrial, convirtiéndose en la principal plataforma exportadora del país y primer lugar nacional en generación de empleo de la Industria Manufacturera, Maquiladora y de Servicios de Exportación.
En conjunto con las instituciones de gobierno la iniciativa privada puede ampliar los horizontes para fomentar la creación de nuevos instrumentos o bien cadenas de valor locales; además de facilitar la vinculación y el encadenamiento productivo de las micro, pequeñas y medianas empresas, como proveedoras de empresas chihuahuenses, nacionales e internacionales a fin de que eleven su competitividad.
Aunque sabemos que Gobierno del Estado está realizando lo propio a través de la atracción de inversión, desarrollo de talento y estrategias de especialización inteligente en cada una de las regiones de la entidad, debemos contribuir al fortalecimiento y consolidación de todo el sector productivo estatal.
Es de destacar que, en el Índice de Competitividad Estatal (ICE) 2023, 10 estados mejoraron su posición, 13 retrocedieron y nueve se mantuvieron igual, posicionándose Chihuahua en el octavo lugar dentro de los diez que si registraron un ascenso.
Asimismo, nuestro estado actualmente tiene un crecimiento del 6 por ciento en la atracción de proveeduría local cuando anteriormente estaba al 3 por ciento y en el acumulado nacional cuenta con un 4.7 por ciento muy por debajo del porcentaje de atracción de proveeduría local de un 27 por ciento que presenta el Bajío.
Actualmente, existe una crisis logística a nivel mundial lo que afecta en costos y tiempos a las industrias, por lo que debemos reconsiderar la creación de una Agencia Estatal de Proveeduría que impulsará las cadenas de suministro y valor, ya que está comprobado a nivel mundial que el encadenamiento productivo es un detonante de la economía; pues en la medida que nuestra entidad sea más competitiva, más atractiva es y será para la inversión.
Impulsar, fomentar, coordinar, cooperar y coadyuvar en el desarrollo de las acciones públicas y privadas relacionadas con la generación de nuevas estrategias económicas es una obligación que debemos tomar juntos para elevar la competitividad de nuestras empresas, micro empresas, e industria, pues es notorio, que, aunque se han avanzado puntos porcentuales, aún es débil la apuesta por la proveeduría local, escenario que siendo optimista se puede cambiar aún más.