/ lunes 22 de julio de 2024

Nuestras empresas deben de voltear a ver hacia el norte

En este nuevo artículo quiero hablarles de la importancia de tener un sector empresarial organizado fuerte y cohesionado, como es el caso de Chihuahua; desde mi perspectiva, los diversos organismos de la Iniciativa Privada fungen como motores que mantienen a miles de empresas vivas a nivel nacional e internacional; estas organizaciones empresariales, bien estructuradas, permiten a las unidades económicas mantenerse y crecer, o, en su defecto, ir en declive y morir.

Por eso, es necesario que las compañías cuenten con el respaldo de un organismo experto en el impulso empresarial, sea cual sea su sector, ya que tienen la capacidad de formar, fortalecer y ayudar a expandir las actividades de sus empresas socias.

Tomando en cuenta que en Chihuahua estamos en una situación envidiable, respecto al resto de la república, en la relación entre organismos empresariales, tenemos que considerar esa ventaja para consolidar un ecosistema más competitivo y galopante.

Analizando lo antes dicho, es importante no solo permanecer en “lo local”, sino voltear la “jugosa” relación que podemos tener con Estados Unidos y Canadá, por varias razones. En primer lugar, porque el bloque económico de Norteamérica es el más grande y se erige como el principal mercado para nuestras operaciones comerciales.

En ese sentido, creo importante considerar que, como sector, en alianza con los distintos niveles de gobierno, debemos mantener una relación sólida con el vecino país del norte, porque nos brinda acceso a un mercado amplio y diversificado, que nos abre el camino para expandir nuestras operaciones y aumentar nuestra presencia a nivel global.

Además, Estados Unidos es un país con altos estándares en términos de transparencia, cumplimiento normativo y protección de la propiedad intelectual, a lo cual debemos aspirar como sector productivo si es que queremos ser más competitivos en el entorno empresarial mundial.

Es importante también saber que, al asociarnos con empresas estadounidenses, podemos beneficiarnos de su experiencia y buenas prácticas empresariales, lo que contribuye a fortalecer nuestra reputación y credibilidad en el mercado global.


En contraparte, pudiéramos enfocamos a abrir nuevas perspectivas de crecimiento empresarial con países del nivel de Estados unidos, como Rusia y China, pero si lo hacemos podríamos caer en grandes desafíos, por las diferencias culturales, normativas y políticas que tenemos con esas naciones, aparte de la distancia territorial que implicaría incrementar los costos para el traslado de mercancías.

Aunado a ello, esos dos países tienen sistemas políticos y económicos diferentes a los de Occidente, lo que ha tensionado el comercio y las relaciones diplomáticas a nivel mundial, lo que obviamente propicia incertidumbre y riesgos para nuestras operaciones comerciales.

Además, la falta de transparencia y el riesgo de corrupción en algunos sectores de la economía de estos países pueden ser un obstáculo para mantener una relación comercial ética y sostenible.

Por ello es que debemos voltear a ver hacia el norte de América, porque su presencia y nivel mundial, es clave para profundizar en estrategias que deriven en crecimiento de nuestro país y por ende nuestras empresas.

Al mantener una relación sólida con Estados Unidos, podemos garantizar la sostenibilidad y el éxito a largo plazo de nuestras operaciones comerciales, de nuestra economía y de una vida con mayor calidad para nuestros colaboradores.

Voltear a ver el norte, significa abrir nuestra burbuja y salir a conocer nuevas tendencias de comercio, cuestiones empresariales relacionadas con la legalidad, con dinámicas revolucionadas de comercialización, así como para atraer más productos, e incluso inversiones, que pueden detonar en más y mejores empleos en Chihuahua.


Presidente de Desarrollo Económico de Chihuahua

jorgercruz@me.com



En este nuevo artículo quiero hablarles de la importancia de tener un sector empresarial organizado fuerte y cohesionado, como es el caso de Chihuahua; desde mi perspectiva, los diversos organismos de la Iniciativa Privada fungen como motores que mantienen a miles de empresas vivas a nivel nacional e internacional; estas organizaciones empresariales, bien estructuradas, permiten a las unidades económicas mantenerse y crecer, o, en su defecto, ir en declive y morir.

Por eso, es necesario que las compañías cuenten con el respaldo de un organismo experto en el impulso empresarial, sea cual sea su sector, ya que tienen la capacidad de formar, fortalecer y ayudar a expandir las actividades de sus empresas socias.

Tomando en cuenta que en Chihuahua estamos en una situación envidiable, respecto al resto de la república, en la relación entre organismos empresariales, tenemos que considerar esa ventaja para consolidar un ecosistema más competitivo y galopante.

Analizando lo antes dicho, es importante no solo permanecer en “lo local”, sino voltear la “jugosa” relación que podemos tener con Estados Unidos y Canadá, por varias razones. En primer lugar, porque el bloque económico de Norteamérica es el más grande y se erige como el principal mercado para nuestras operaciones comerciales.

En ese sentido, creo importante considerar que, como sector, en alianza con los distintos niveles de gobierno, debemos mantener una relación sólida con el vecino país del norte, porque nos brinda acceso a un mercado amplio y diversificado, que nos abre el camino para expandir nuestras operaciones y aumentar nuestra presencia a nivel global.

Además, Estados Unidos es un país con altos estándares en términos de transparencia, cumplimiento normativo y protección de la propiedad intelectual, a lo cual debemos aspirar como sector productivo si es que queremos ser más competitivos en el entorno empresarial mundial.

Es importante también saber que, al asociarnos con empresas estadounidenses, podemos beneficiarnos de su experiencia y buenas prácticas empresariales, lo que contribuye a fortalecer nuestra reputación y credibilidad en el mercado global.


En contraparte, pudiéramos enfocamos a abrir nuevas perspectivas de crecimiento empresarial con países del nivel de Estados unidos, como Rusia y China, pero si lo hacemos podríamos caer en grandes desafíos, por las diferencias culturales, normativas y políticas que tenemos con esas naciones, aparte de la distancia territorial que implicaría incrementar los costos para el traslado de mercancías.

Aunado a ello, esos dos países tienen sistemas políticos y económicos diferentes a los de Occidente, lo que ha tensionado el comercio y las relaciones diplomáticas a nivel mundial, lo que obviamente propicia incertidumbre y riesgos para nuestras operaciones comerciales.

Además, la falta de transparencia y el riesgo de corrupción en algunos sectores de la economía de estos países pueden ser un obstáculo para mantener una relación comercial ética y sostenible.

Por ello es que debemos voltear a ver hacia el norte de América, porque su presencia y nivel mundial, es clave para profundizar en estrategias que deriven en crecimiento de nuestro país y por ende nuestras empresas.

Al mantener una relación sólida con Estados Unidos, podemos garantizar la sostenibilidad y el éxito a largo plazo de nuestras operaciones comerciales, de nuestra economía y de una vida con mayor calidad para nuestros colaboradores.

Voltear a ver el norte, significa abrir nuestra burbuja y salir a conocer nuevas tendencias de comercio, cuestiones empresariales relacionadas con la legalidad, con dinámicas revolucionadas de comercialización, así como para atraer más productos, e incluso inversiones, que pueden detonar en más y mejores empleos en Chihuahua.


Presidente de Desarrollo Económico de Chihuahua

jorgercruz@me.com