Por: José Luis Jáquez Balderrama
Pega fuerte la cuarta ola del Covid-19 en el mundo, pero los estragos son principalmente en Europa, donde han regresado las medidas extremas en la población, pues se habían “relajado”.
Cuarta ola del coronavirus no da tregua, por ejemplo en Alemania se reportó un nuevo pico histórico, con más 45,081 contagios en una semana, pese a que dos tercios de la población ya cuentan con la vacuna.
En algunas regiones la incidencia supera los 1,000 casos por cada 100,000 habitantes.
Según la Organización Mundial de la Salud, existe la llamada “inmunidad menguante” es decir, las vacunas reducen en forma significativa el riesgo de sufrir una forma severa de Covid-19 o de morir por esta causa, pero no protegen íntegramente del contagio.
Con el incremento de casos, aumenta también para las personas vacunadas el riesgo de contraer la enfermedad.
La variante Delta se ha convertido en la predominante, sobre todo en Europa. Y es dos veces más contagiosa que otras.
Otro factor que eleva a la cuarta ola es la llegada del invierno. La variante Delta “ama el frío”, dicen los expertos de la OMS.
A 22 meses de haberse registrado los primeros contagios de Covid-19, el mundo alcanzó un nuevo hito en la pandemia, al superar los 5.1 millones de muertes.
Estados Unidos es el país que encabeza la clasificación, al superar los 780,800 decesos, seguido de Brasil con alrededor de 610,300. Y más de 252.5 millones de casos positivos confirmados.
En México van 292 mil muertes ( al 20 de noviembre) y tres millones 854 mil contagios. En Chihuahua se han registrado 8 mil 248 fallecimientos a causa de la pandemia y 84 mil contagios.
Lo preocupante es que sigue la escasez de vacunas principalmente en naciones pobres, la falta de camas en las unidades de cuidados intensivos y de suficientes suministros en hospitales. El personal sanitario ha sido “desbordado” por el mal.
Tal parece que en nuestra nación ha “desaparecido el miedo” al virus, pues han aumentado las reuniones masivas ( festivales artísticos, deportivos y familiares) y se han flexibilizado las medidas sanitarias. Esto no debe pasar.
La OMS ha propuesto varias medidas que se podrían tomar en el corto plazo por parte de los liderazgos y gobiernos del mundo, para actuar de forma inmediata, por ejemplo:
Un acuerdo internacional urgente sobre la preparación y la respuesta a las pandemias; cumbre de jefes de gobierno; contribuciones para financiar para apoyar las funciones de salud. Y vacuna universal.
Es urgente incrementar la tasa de vacunación ante la amenaza de la cuarta ola, de lo contrario será difícil controlar la situación. Las vacunas son lo mejor que ha pasado, pero hay demasiada gente que no las ha recibido. El mal no se ha terminado.
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