/ lunes 5 de agosto de 2024

Pemex en la transición del gobierno

El pasado 26 de julio, Petróleos Mexicanos (Pemex), presentó sus resultados preliminares al 30 de junio de 2024, en los que destaca como aspectos claves de su fortalecimiento como empresa productiva del Estado, durante el gobierno de la cuarta transformación, la recuperación de un perfil de producción creciente, la estabilización y el crecimiento de las reservas probadas, el incremento sustancial en el proceso de crudo, la incorporación de la refinería de Deer Park en Texas al sistema nacional de refinación, la construcción de la refinería Olmeca en Dos Bocas Tabasco, el fortalecimiento de la cadena de fertilizantes y finalmente unas finanzas mejoradas, acompañadas de una reducción en la deuda que, habiendo alcanzado en algún momento los $106 mil millones de dólares, ya se encuentra por debajo de los $97 mil millones de dólares.

Se resalta también que las contribuciones netas de Pemex a la Hacienda Federal, esto es, el dinero pagado por impuestos y derechos, restados de las aportaciones recibidas, ascendieron del 2019 al primer semestre del 2024 a 3 billones, 128 mil millones de pesos.

Las principales observaciones al reporte serían las siguientes:

  1. 1: Si bien resalta la estabilización en la producción de hidrocarburos líquidos en 1 millón 784 mil barriles diarios en este 2024, lejos de las metas ofrecidas por el gobierno federal al inicio del sexenio de 2 millones 400 mil barriles diarios y luego de 2 millones de barriles diarios a su mitad, resulta preocupante la disminución en la producción de 118 mil barriles diarios promedio de este año con respecto al anterior.
  2. El proceso de producción de crudo sigue estando por debajo de su potencial, no obstante, la mejora observada en el de refinación.
  3. También preocupa la reducción en la producción de gas y que en términos generales se carece de un programa para revertir la alta dependencia que tenemos del importado, principalmente estadounidense, lo que de continuar así difícilmente permitirá mejorar en el propósito de alcanzar mayores y mejores niveles de soberanía energética.
  4. Para mejorar la producción de gas se ha reactivado el desarrollo del campo Lakach, descubierto desde 2006. La explotación de este campo fue abandonada en 2016 con U.S.$1 mil millones de dólares invertidos, bajo el argumento de que su rentabilidad era casi nula. Con la cuantiosa inversión que el desarrollo demanda y los bajos precios del gas estadounidense, pareciere poco atractivo su desarrollo; no obstante, se ha anunciado su reanudación con una inversión de U.S. $ 1,884 millones de dólares, proyectando iniciar producción en diciembre de 2026.

  5. 2: Pemex continúa enfrentando una situación financiera débil, que se refleja principalmente en la reducción de su flujo operativo (EBITDA, por sus siglas en inglés). El EBITDA del segundo trimestre del 2024 fue de U.S. $56 mil millones de dólares, contrastado con los U.S. $92 mil millones de dólares del mismo período del año anterior.

De este modo, consideramos que Pemex debe continuar con la estrategia de desarrollo de nuevos campos y con la rehabilitación de los ya maduros, para incrementar la producción de hidrocarburos líquidos y de gas. Esto utilizando nuevas tecnologías e instrumentando prácticas más eficientes para la extracción y proceso de hidrocarburos, mejorar la infraestructura de producción, el perfil de sus finanzas y avanzar también en sostenibilidad y seguridad operativa.



El pasado 26 de julio, Petróleos Mexicanos (Pemex), presentó sus resultados preliminares al 30 de junio de 2024, en los que destaca como aspectos claves de su fortalecimiento como empresa productiva del Estado, durante el gobierno de la cuarta transformación, la recuperación de un perfil de producción creciente, la estabilización y el crecimiento de las reservas probadas, el incremento sustancial en el proceso de crudo, la incorporación de la refinería de Deer Park en Texas al sistema nacional de refinación, la construcción de la refinería Olmeca en Dos Bocas Tabasco, el fortalecimiento de la cadena de fertilizantes y finalmente unas finanzas mejoradas, acompañadas de una reducción en la deuda que, habiendo alcanzado en algún momento los $106 mil millones de dólares, ya se encuentra por debajo de los $97 mil millones de dólares.

Se resalta también que las contribuciones netas de Pemex a la Hacienda Federal, esto es, el dinero pagado por impuestos y derechos, restados de las aportaciones recibidas, ascendieron del 2019 al primer semestre del 2024 a 3 billones, 128 mil millones de pesos.

Las principales observaciones al reporte serían las siguientes:

  1. 1: Si bien resalta la estabilización en la producción de hidrocarburos líquidos en 1 millón 784 mil barriles diarios en este 2024, lejos de las metas ofrecidas por el gobierno federal al inicio del sexenio de 2 millones 400 mil barriles diarios y luego de 2 millones de barriles diarios a su mitad, resulta preocupante la disminución en la producción de 118 mil barriles diarios promedio de este año con respecto al anterior.
  2. El proceso de producción de crudo sigue estando por debajo de su potencial, no obstante, la mejora observada en el de refinación.
  3. También preocupa la reducción en la producción de gas y que en términos generales se carece de un programa para revertir la alta dependencia que tenemos del importado, principalmente estadounidense, lo que de continuar así difícilmente permitirá mejorar en el propósito de alcanzar mayores y mejores niveles de soberanía energética.
  4. Para mejorar la producción de gas se ha reactivado el desarrollo del campo Lakach, descubierto desde 2006. La explotación de este campo fue abandonada en 2016 con U.S.$1 mil millones de dólares invertidos, bajo el argumento de que su rentabilidad era casi nula. Con la cuantiosa inversión que el desarrollo demanda y los bajos precios del gas estadounidense, pareciere poco atractivo su desarrollo; no obstante, se ha anunciado su reanudación con una inversión de U.S. $ 1,884 millones de dólares, proyectando iniciar producción en diciembre de 2026.

  5. 2: Pemex continúa enfrentando una situación financiera débil, que se refleja principalmente en la reducción de su flujo operativo (EBITDA, por sus siglas en inglés). El EBITDA del segundo trimestre del 2024 fue de U.S. $56 mil millones de dólares, contrastado con los U.S. $92 mil millones de dólares del mismo período del año anterior.

De este modo, consideramos que Pemex debe continuar con la estrategia de desarrollo de nuevos campos y con la rehabilitación de los ya maduros, para incrementar la producción de hidrocarburos líquidos y de gas. Esto utilizando nuevas tecnologías e instrumentando prácticas más eficientes para la extracción y proceso de hidrocarburos, mejorar la infraestructura de producción, el perfil de sus finanzas y avanzar también en sostenibilidad y seguridad operativa.