/ martes 8 de octubre de 2024

Perfil humano / A un año de la guerra entre Israel y Hamás

El 7 de octubre del 2023, después de lanzar mil misiles, cientos de milicianos de Hamás ingresaron en Israel y cometieron una masacre en un Kibutz con un saldo de más de mil muertos y cientos de secuestrados.

De inmediato el ejército israelita invadió la Franja de Gaza para eliminar a los integrantes de Hamás y rescatar a los israelitas plagiados.

La ofensiva militar del estado de Israel continúa con un saldo de casi 42 mil palestinos muertos de acuerdo a sus autoridades.

La feroz ofensiva judía en lugar de menguar ha aumentado pues la decisión del primer ministro israelí Netanyahu es exterminar a Hamás y liberar a sus compatriotas secuestrados.

Las manifestaciones de civiles israelíes han sido a favor de un cese al fuego para que Hamás regrese a sus compatriotas con vida, aunque al parecer ya solo son unos 70 los sobrevivientes.

Netanyahu ha reiterado una y otra vez que no cesará la invasión a Gaza hasta que no quede un solo militante de Hamás y recuperen a los rehenes judíos.

El conflicto está escalando a todo Medio Oriente pues además Israel ha bombardeado a Líbano en respuesta a los misiles que les ha lanzado el grupo terrorista Hezbolá.

El Mossad, la agencia de inteligencia israelí, manipuló para que les estallaron miles de aparatos de comunicación en las manos a supuestos militantes de Hezbolá causando varios muertos y cientos de heridos.

Luego Israel bombardeó el sur de Beirut matando al líder máximo de Hezbolá.

La reacción de Irán fue enviar en represalia unos 180 misiles contra territorio judío, aunque debido a la Cúpula de Hierro solo causó la muerte de un palestino que caminaba cuando le cayó parte de uno de los proyectiles destruidos.

Irán es el patrocinador de las milicias, consideradas como grupos terroristas por algunos países, como Hamás, Hezbolá y los Hutíes.

Estos últimos han atacado continuamente a los buques petroleros internacionales que transitan por el Mar Rojo rumbo al Canal de Suez.

Gobernado desde 1979 por los ayatolas chiitas, Irán es un declarado enemigo de Israel y Estados Unidos. Como confrontarlos directamente sería un suicidio, mejor optó por patrocinar y adiestrar a estas y otras agrupaciones paramilitares.

La Guardia Revolucionaria, la élite del ejército iraní, es la encargada de esta tarea y es la que de facto dirige a las milicias citadas y otras más en Medio Oriente.

En la década de los ochenta Irán se enfrentó a Irak, entonces bajo el mando del sunnita Sadam Hussein, en una guerra que duró ocho años y causó un millón de muertos a cada país.

Para sostenerse en el poder los ayatolas han declarado la guerra santa a los países occidentales a los que consideran infieles y propagadores de los peores males para los musulmanes.

Es conocida además su perniciosa y autoritaria política en contra de las mujeres iraníes al someterlas a vejaciones tradicionales, como la ejecución popular a pedradas.

La masacre cometida por Hamás ordenada por Irán al parecer fue con la intención de echar abajo el posible tratado que iban a realizar Arabia Saudita e Israel.

De haberse llevado a cabo esta histórica alianza entre Israel y el mayor productor petrolero árabe, meca además del islamismo, ambos habrían relegado a Irán como potencia del Medio Oriente.

La confrontación bélica entre Israel y sus contrincantes vecinos puede convertirse en una guerra regional más en el conflictivo Medio Oriente, pero también llegar a ser una seria amenaza para la estabilidad política y la paz mundial.


Dr. en Comunicación, Docente en la Facultad de Filosofía de la UACh.

efernandezarmendariz@gmail.com