La detención de Ismael Mayo Zambada por agentes federales estadounidenses ha cimbrado no sólo al Cártel de Sinaloa, sino también al gobierno de López Obrador.
En un hecho insólito, Zambada fue arrestado cuando aterrizó el avión en que viajaba con Joaquín Guzmán El Chapito en el aeropuerto de Santa Teresa, Nuevo México.
Los dos capos del narcotráfico fueron trasladados a una cárcel en El Paso, Texas, donde se localiza uno de los principales centros de la DEA.
La acción fue tan sorpresiva que el mismo AMLO tuvo que reconocer su ignorancia, al igual que su secretaria de seguridad.
Esta aprehensión del narco más buscado por Estados Unidos fue por lo tanto obra y gracia de las autoridades federales del vecino país.
Ismael Zambada tenía cinco décadas dirigiendo las operaciones del Cártel de Sinaloa, del que era el líder junto con el Chapo Guzmán.
La primera y última vez que concedió una entrevista fue a Julio Scherer, fundador y director de Proceso a principios de este siglo.
Entonces el Mayo lucía y presumía su habilidad para evitar ser arrestado ya que cada noche dormía en una casa distinta al estilo de Fidel Castro.
Ahora a sus 76 años aparece demacrado y viejo, al parecer enfermo y cansado de andar huyendo y cuidarse de sus enemigos.
La DEA ofrecía una recompensa de 15 millones de dólares por la información que llevara a su captura y por cada Chapito cinco millones de dólares.
En esta ocasión tal vez alguien o algunos obtuvieron 20 millones de dólares por el par de narcotraficantes arrestados.
La periodista Anabel Hernández subió a las redes un audiovisual donde reitera una vez más lo que ya afirmó en su libro “La historia secreta: AMLO y el Cártel de Sinaloa”.
Anabel señala que el actual presidente recibió dinero del Cártel de Sinaloa en sus tres campañas presidenciales.
Afirma que las complicidades entre López Obrador y los capos de esta organización continúa pues sus hijos son amigos y socios de los Chapitos.
La cuestionada política de seguridad de su gobierno de “abrazos y no balazos” así como su púbica deferencia a la madre del Chapo Guzmán por lo tanto pueden ser algo más que señales de su asociación con esta organización criminal.
La reportera de Proceso advierte que el arresto del Mayo tendrá serias repercusiones pues éste tal vez como testigo protegido podría declarar sus nexos con el actual mandatario.
Hasta el momento todo hace indicar que los dos capos se entregaron voluntariamente para obtener privilegios legales por parte de la justicia norteamericana.
Por consiguiente, la información que les de Zambada va a ser relevante pues nadie como él conoce las relaciones de los narcos con las autoridades mexicanas de todos los niveles.
Para Biden es un buen acierto para contrarrestar la agresiva narrativa de Trump sobre la poca acción de su gobierno en contra de los narcotraficantes mexicanos.
Por otra parte, no se han dado enfrentamientos violentos entre la gente del mayo y la de los Chapitos, lo que fortalece la hipótesis de que se entregaron voluntariamente.
Obviamente la relación de AMLO con el narcotráfico también afecta a la candidata presidencial electa pues también ha sido mencionada de estar implicada con los cárteles de la droga.
El arresto del Mayo Zambada no concluye con su condena en un penal de alta seguridad pues tendrá todavía una historia que contar para terror de los funcionarios públicos que fueron sus cómplices, desde los más bajos hasta los más altos niveles.
Dr. en Comunicación, Docente en la Facultad de Filosofía de la UACh.
efernandezarmendariz@gmail.com
