/ sábado 1 de junio de 2024

Retos del periodismo

La revolución tecnológica y el internet han producido cambios vertiginosos en los medios de comunicación y en la sociedad. Hay nuevas formas de informar y nuevas demandas, de las cuales el periodista no puedes escapar.

El periodismo no es estático, por lo que el periodista debe adaptarse a las nuevas necesidades de informar. Hoy, informar, donde el medio por excelencia es el audiovisual, consiste en poner al ciudadano directamente en contacto con el acontecimiento.

El periodista y semiólogo español Ignacio Ramonet, exdirector de Le Monde Diplomatique escribe en su artículo: "Los Periodistas Están en Vías de Extinción", que el periodista y el periodismo tendrán que “readaptarse a esta nueva demanda de una mercancía llamada información, donde la instantaneidad es su razón de ser”.

Hoy se abren nuevos rumbos.Las nuevas necesidades del mercado de la información necesitan periodistas que no sean meros escribientes o mensajeros, necesitan observadores que clasifiquen e interpreten lo que sucede. Lo importante consistirá en poner la información lo antes posible al alcance del lector. Esta rapidez está homogeneizando una forma universal de transmitir que se ajusta más a la radio, a la televisión y a Internet que a la prensa.

La prensa, si prevalece esa nueva forma de informar, tendrá que desempeñar un papel más de análisis y profundización de los acontecimientos. Será el medio donde la razón y la comprensión tendrán sus mejores fundamentos, porque como afirma Ramonet, "sólo se comprende con la razón, no se comprende con los ojos o con los sentidos".

Imagen, pocas palabras y ya, es la tendencia, sobre todo en las redes sociales. La empresa periodística comienza a demandar profesionales capaces de actuar como personas polivalentes.

La técnica en el uso de la libreta y la pluma queda relegada a un teclado de computadora, tableta o bien a un teléfono celular. Hoy el periodista manda la noticia al instante para radio, televisión, Internet y las llamadas redes sociales. Es una realidad.

No existe un largo periodo de adaptación para los profesionales de los medios a las nuevas necesidades. Hoy, la rapidez de las tecnologías nos ha hecho “dependientes” del ordenador y el celular. En esta ocasión las cualidades del arte de escribir se quedan bastante relegadas por la curiosidad, la capacidad de adaptación y el dominio de las nuevas tecnologías.

María Teresa Sandoval Martín en su estudio llamado: "Los Periodistas en el Entorno Digital: Hacia el Periodista Multimedia" afirma que en la actualidad conviven dos tipos de periodistas: El tradicional especialista de su propio medio y los multimedias.

Multimedias, son más rentables para la empresa.

El abanico de labores para el profesional de la comunicación cada día es más amplio, pero se corre el riesgo de que el periodista tradicional, convierta su trabajo en una rutina.

¿El periodista que hasta hoy conocemos puede estar en vías de extinción?

Los cambios tecnológicos siempre han reajustado y proporcionado nuevos valores a la labor periodística que ha favorecido ese oficio que se caracteriza por su versatilidad.

El periodista tradicional nunca desaparecerá porque es el modelo a seguir. Es el profesional preocupado por la calidad de la información, su forma, sus antecedentes y su explicación. Los medios tienen en sus mesas de trabajo y sus redacciones un lugar privilegiado para ejercer ese periodismo que conocemos desde antaño.

Las nuevas tecnologías y las necesidades sociales demandan nuevas funciones en los periodistas que darán un buen periodismo si su única pasión es la de informar.

Está en la mano del profesional que su oficio se convierta en una rutina o su razón de ser. Esta pasión eliminará la posibilidad de realizar un mal periodismo y potenciará todo lo contrario. Las facultades de periodismo deben proporcionar las claves profesionales necesarias lo más adaptadas posible a la realidad profesional, pero será una labor personal la que convierta al trabajador en un buen periodista. El trabajo diario, su disciplina, entusiasmo y pasión, como ya hemos dicho, es lo que lo convertirá en un profesional.

La revolución tecnológica y el internet han producido cambios vertiginosos en los medios de comunicación y en la sociedad. Hay nuevas formas de informar y nuevas demandas, de las cuales el periodista no puedes escapar.

El periodismo no es estático, por lo que el periodista debe adaptarse a las nuevas necesidades de informar. Hoy, informar, donde el medio por excelencia es el audiovisual, consiste en poner al ciudadano directamente en contacto con el acontecimiento.

El periodista y semiólogo español Ignacio Ramonet, exdirector de Le Monde Diplomatique escribe en su artículo: "Los Periodistas Están en Vías de Extinción", que el periodista y el periodismo tendrán que “readaptarse a esta nueva demanda de una mercancía llamada información, donde la instantaneidad es su razón de ser”.

Hoy se abren nuevos rumbos.Las nuevas necesidades del mercado de la información necesitan periodistas que no sean meros escribientes o mensajeros, necesitan observadores que clasifiquen e interpreten lo que sucede. Lo importante consistirá en poner la información lo antes posible al alcance del lector. Esta rapidez está homogeneizando una forma universal de transmitir que se ajusta más a la radio, a la televisión y a Internet que a la prensa.

La prensa, si prevalece esa nueva forma de informar, tendrá que desempeñar un papel más de análisis y profundización de los acontecimientos. Será el medio donde la razón y la comprensión tendrán sus mejores fundamentos, porque como afirma Ramonet, "sólo se comprende con la razón, no se comprende con los ojos o con los sentidos".

Imagen, pocas palabras y ya, es la tendencia, sobre todo en las redes sociales. La empresa periodística comienza a demandar profesionales capaces de actuar como personas polivalentes.

La técnica en el uso de la libreta y la pluma queda relegada a un teclado de computadora, tableta o bien a un teléfono celular. Hoy el periodista manda la noticia al instante para radio, televisión, Internet y las llamadas redes sociales. Es una realidad.

No existe un largo periodo de adaptación para los profesionales de los medios a las nuevas necesidades. Hoy, la rapidez de las tecnologías nos ha hecho “dependientes” del ordenador y el celular. En esta ocasión las cualidades del arte de escribir se quedan bastante relegadas por la curiosidad, la capacidad de adaptación y el dominio de las nuevas tecnologías.

María Teresa Sandoval Martín en su estudio llamado: "Los Periodistas en el Entorno Digital: Hacia el Periodista Multimedia" afirma que en la actualidad conviven dos tipos de periodistas: El tradicional especialista de su propio medio y los multimedias.

Multimedias, son más rentables para la empresa.

El abanico de labores para el profesional de la comunicación cada día es más amplio, pero se corre el riesgo de que el periodista tradicional, convierta su trabajo en una rutina.

¿El periodista que hasta hoy conocemos puede estar en vías de extinción?

Los cambios tecnológicos siempre han reajustado y proporcionado nuevos valores a la labor periodística que ha favorecido ese oficio que se caracteriza por su versatilidad.

El periodista tradicional nunca desaparecerá porque es el modelo a seguir. Es el profesional preocupado por la calidad de la información, su forma, sus antecedentes y su explicación. Los medios tienen en sus mesas de trabajo y sus redacciones un lugar privilegiado para ejercer ese periodismo que conocemos desde antaño.

Las nuevas tecnologías y las necesidades sociales demandan nuevas funciones en los periodistas que darán un buen periodismo si su única pasión es la de informar.

Está en la mano del profesional que su oficio se convierta en una rutina o su razón de ser. Esta pasión eliminará la posibilidad de realizar un mal periodismo y potenciará todo lo contrario. Las facultades de periodismo deben proporcionar las claves profesionales necesarias lo más adaptadas posible a la realidad profesional, pero será una labor personal la que convierta al trabajador en un buen periodista. El trabajo diario, su disciplina, entusiasmo y pasión, como ya hemos dicho, es lo que lo convertirá en un profesional.