Desde el inicio del aislamiento social debido a la pandemia y el inminente cierre de las escuelas como protección de la salud de estudiantes y docentes, el alto impacto en la educación arrojó como consecuencia la diminución del aprovechamiento escolar de los alumnos de nivel básico, quienes se vieron súbitamente privados del espacio escolar que es el lugar educativo por excelencia, afirman maestros.

Mentores y niños “se comunicaron” desde sus respectivos hogares como recurso coyuntural que de ninguna manera sustituyó al plantel, agregan los maestros, además tocan la ansiedad que esto provocó en los estudiantes, quienes se mostraron inquietos por el cambio repentino, lo que se vio reflejando en el aprendizaje.

La baja en el aprovechamiento escolar, comentan docentes, se debió a que no se alcanzaron a ver todos los temas; resaltando que la pandemia tiene efecto adverso a la igualdad de oportunidades y disponibilidad de recursos, quienes tuvieron acceso a la tecnología estuvieron en mayor ventaja sobre los que presentaron dificultades de conexión a la red.

El 30% del aprovechamiento en los contenidos no fue alcanzado por los alumnos debido a la contingencia mundial de Covid-19, lo que llevó a la población a resguardarse en casa para evitar mayor propagación.

Históricamente la escuela tiene un papel fundamental en la enseñanza-aprendizaje, la presencia de los alumnos en las escuelas es el fundamento principal para que la apropiación del conocimiento ocurra; la enseñanza virtual entonces jamás será sustituto de la persona de los profesores por mas tecnología que exista en el mundo, pues la interrelación entre maestro-alumno es indispensable para detectar el nivel académico de cada niño.

Para el próximo ciclo, propondría a las autoridades educativas una repetición del ciclo escolar en su mismo grado porque efectivamente nuestros estudiantes han dejado muchos meses atrás el contacto real con el conocimiento, lo que puede provocar en algunos casos la simulación para decir que los alumnos en una o dos semanas de "diagnóstico y retroalimentación" practicado se han nivelado.

El apoyo de padres de familia fue fundamental, en lo que respecta a mi grupo fueron detalles mínimos lo que faltó de verse -comenta- aunque no se alcanzó el 100% de aprovechamiento debido al a pandemia. El virus afectó en todos los aspectos: físico, mental, emocional, laboral, y referente a la forma de evaluar, no fue fácil debido a la inestabiidad de la situación.

El próximo ciclo escolar dependerá mucho de la metodología del maestro; hay que tener conciencia de que faltaron temas de verse en el año anterior “por ejemplo: si no lograron dominar la división y comienzan con la división entonces claro que les va a ir mal”. No se puede comenzar de lleno el siguiente año porque faltó la pedagogía en el aula, la explicación.

MAESTRO DE 4° AÑO PRIMARIA

En este tiempo de contingencia fue difícil trabajar de forma virtual, ya que es necesario el contacto con los niños para apoyarlos en las dudas que lleguen a tener.

Tuve la experiencia con mis alumnos y papás que trabajaron duro en casa, aun así se va a tener que dar un reforzamiento a los temas que no se alcanzaron a ver de forma presencial, porque considero muy importante la retroalimentación en clase.

Por los meses que no han tenido clases los niños se han visto afectados en el proceso de aprendizaje, también están en un estado de ansiedad, los mismos niños lo manifiestan y también los papás.

Considero que los niños sí perdieron mucho aprovechamiento ya que no es lo mismo que estar en aula; los padres de familia hicieron su mayor esfuerzo pero no hay como uno como maestro que les esté enseñando.

En mi experiencia considero que aprovecharon un 60% el último trimestre del ciclo escolar y les faltó el 40% restante aun cuando los padres apoyaron.

Es habitual que luego de un periodo de vacaciones los niños regresan un poco desorientados y en lo que tardan otra vez en retomar las clases y en caso de la contingencia que fueron más meses estamos a la expectativa de qué tanto fue el aprovechamiento.

Es difícil medir cuánto aprovecharon los niños, pero claro que no es igual, porque la función del maestro es imprescindible en esta cuestión del aprendizaje y las clases virtuales nunca sustituirán a las presenciales.

La cuestión más que nada es emocional, los niños ahorita están en un encierro muy fuerte. El regreso a clases sí va a ser un poco complicada la cuestión de que viene con muchas restricciones y al niño va a ser muy difícil y complicado controlar incluso el contacto físico con otros compañeros.

Por aislamiento social no se terminaron de ver los temas y fue difícil, sobre todo porque estoy en medio rural, entonces al principio cuando se nos dijo que habría que trabajar por medio de Google Classroom tuve que hacer un sondeo con mi grupo para saber quiénes tenían acceso a una computadora, de los cuales sólo 6 de 28 alumnos podían trabajar con esta modalidad.

Hay mucha incertidumbre, lo que sí estoy segura es que va a haber una gran carga de trabajo para todos los docentes de educación básica. Los padres de familia se dieron cuenta del esfuerzo y trabajo que hacen los maestros día a día en las clases; y a mí me gustó que se involucraran y asimilaran la forma de trabajar y aprender de sus hijos/as. Se viene una época donde ahora más que antes, porque siempre se ha requerido y hablado de lo importante de este tema, se necesitará todo el apoyo, tiempo y atención de los padres y madres de familia para lograr alcanzar la educación completa y óptima de nuestros alumnos.