El acueducto de Chihuahua, aunque es uno de los monumentos históricos más importantes, a menudo permanece en la sombra debido a que su valor estético arquitectónico se considera menos relevante que su función práctica como obra de ingeniería.
Sin embargo, a más de 200 años de su construcción, siguen quedando algunas partes muy bien conservadas, siendo un lugar muy visitado por los chihuahuenses, quienes lo utilizan como locación para sus sesiones fotográficas.
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La historia del Acueducto de Chihuahua
El Acueducto de Chihuahua, construido durante el periodo virreinal, tenía como propósito abastecer de agua corriente a la Villa de San Felipe el Real (nombre previo de la ciudad de Chihuahua). Este sistema hidráulico se basaba en el conocimiento ancestral de la hidráulica y utilizaba canales de diferentes diámetros para controlar el caudal y permitir la irrigación, según se lee en el artículo “El acueducto de Chihuahua, ingeniería de cal y canto” de la arquitecta Wendy Suárez del Centro INAH Chihuahua.
La construcción del Acueducto de Chihuahua comenzó el 12 de diciembre de 1751 por orden del Virrey Don Antonio María de Bucareli y Ursúa, Conde de Revillagigedo. El objetivo era abastecer de agua a la población mediante el impuesto establecido a los productores de oro y plata de la recién creada Casa de Ensaye de Chihuahua. Los maestros de obra Cristóbal de Villa y Agustín Guijarro supervisaron los trabajos del primer tramo, logrando dotar de agua a los suburbios de la villa al poniente en 1768, continúa el artículo.
Está compuesto principalmente de mampostería de piedra caliza labrada y asentada con mortero de cal. Este sistema de conducción de agua incluye diversos elementos, como tramos de acequia, canales cerrados, cañerías y, por supuesto, los arcos que son ampliamente reconocidos.
En 1793, su longitud alcanzaba las 6583 varas, aproximadamente 5500 metros. A lo largo del tiempo, se han realizado obras de ampliación y ramificación, y en 1882 se inició la instalación de tubería metálica, que se fue extendiendo gradualmente. El acueducto abarca varias zonas y colonias de la ciudad, como la colonia Martín López, la calle Benítez y el barrio de Los Cuarteles.
Así luce ahora
El usuario de Tik Tok Charly Díaz (charlycharlymx) compartió un video en el que hace un recorrido de este acueducto y nos cuenta la historia de la construcción. Charly menciona que debido a la contaminación de la parte baja del Río Chuvíscar por parte de hacendados que trataban con metales fue que iniciaron con la construcción del acueducto de estilo románico.
El recorrido comienza en el Parque del Acueducto, el cual se ubica en la parte de atrás de la colonia Martín López. Este parque es muy concurrido por las familias chihuahuenses, quienes acuden normalmente para realizarse sesiones de fotos para su boda, quinceañera o cualquier otra celebración, incluso se realizan eventos.
Luego de tantos años, sorprende que los siete arcos que hay se conservan en muy buen estado. Charly Díaz cuenta que el agua se recogía desde el Río Chuvíscar y pasaba por todo el canal, que tiene una altura aproximada de 1 metro.
Este acueducto pasaba por las actuales colonias Campesina, Zarco y Los Cuarteles.
El video continua hasta la calle Benítez, que es el punto donde más conservado se encuentra el acueducto, el cual está conformado por 52 arcos, los cuales van aumentando de altura. Esta obra llegó hasta la calle Vicente Guerrero y Allende, en donde colocaron pilas para recolectar el agua.
Por último, el tiktoker cuenta que a finales del siglo 18 el minero Andrés Manuel construyó una acequia para su hacienda “El Mortero”, la cual se dedicaba a la limpia y fundación de metales. Esta acequia se conectaba con el acueducto principal. Actualmente, esta parte es un parque público del gobierno.
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