/ domingo 26 de diciembre de 2021

La muerte del “Loco Police”: el infame caso de desaparición en Juárez

Descubre una de las historias misteriosas más conocidas que ronda por Ciudad Juárez

Con un huérfano volante de coche asido a sus manos, un curioso individuo rondaba las calles de Ciudad Juárez durante la década del 40. El colorido personaje llevaba puesto un sombrero aplanado y una desgastada ropa más parecida a trapos rasgados y traslúcidos que a prendas.

➡️ Recibe las noticias más relevantes de Chihuahua, Juárez y Parral directo a tu correo electrónico. ¡Suscríbete a nuestro Newsletter!

De norte a sur, de este a oeste, el llamativo sujeto poco a poco comenzó a volverse parte de la postal urbana. Entre el lujo ostentoso de los pachucos, el bullicio de los vendedores ambulantes y los turistas estadounidenses que llegaban desde El Paso, el Loco Police, como suele pasar a ciertos individuos en sus condiciones, comenzó a tomar estatus de monumento viviente a la inocencia y a la locura.

Aquella mágica locura que de su peculiar habito emanaba, terminó volviendo cómplices a los conductores de auténticos vehículos, quienes al verle caminar en medio de la calle con aquel gastado volante en mano, hacían alto y le permitían pasar, como si en un invisible Rolls Roice se desplazara.

Incluso los transeúntes, contagiados por el comportamiento del individuo, de vez en cuando lanzaban un grito y pedían al “conductor” manejar con más cuidado para que no los fuera a “atropellar”.

Con el paso del tiempo, sus largos recorridos comenzaron a reducirse, una vez que la fama local le trascendió, hasta el punto en que lo cotidiano era encontrarle rondando únicamente por las calles de la zona centro de la ciudad.

Era allí donde pedía a los ciudadanos dinero para subsistir. A veces sentado en el exterior de la Presidencia Municipal, estiraba su mano y clamaba a los transeúntes misericordia para sortear el hambre un día a la vez; la sed, la saciaba bebiendo del viejo depósito de agua que surtía la zona y estaba ubicado en los patios del mismo edificio municipal, a donde, a escondidas, trepaba y cargaba un recipiente que llevaba siempre consigo para mitigar el estío del desierto.

Su desaparición fue súbita. Los ciudadanos y turistas acostumbrados a su presencia pronto comenzaron a echarle de menos. Nadie tenía piste de dónde podría estar.

La ciudad ya no era lo mismo sin él, pero al cabo de unas semanas, todo el mundo dejó de pensar en él, quizás creyendo que finalmente había sido apoyado por algún generoso ciudadano que le habría ayudado con un techo y alimento.

Pero no pudieron estar más lejos de acertar. Fue la pestilencia en las cercanías del Municipio así como el hedor del agua que brotaba de las llaves de los negocios y viviendas aledañas lo que delató la ubicación del infeliz sujeto.

Cierta noche, cuando todos los empleados del edificio se habían retirado, el Loco Police se dispuso, como de costumbre, a rellenar su ánfora con agua, sin embargo, accidentalmente cayó dentro del depósito, donde murió ahogado.

Cuando lo encontraron sin vida en esa cisterna, su cuerpo estaba ya en avanzado estado de descomposición. El depósito metálico fue desmantelado por órdenes de la presidencia municipal, y su hallazgo se manejó con total hermetismo. Incluso quienes se enteraron en su momento prefirieron no volver a hablar de ello hasta después de varias décadas, cuando casualmente la verdad salió a la luz.

¿Cuántas personas, sin sospecharlo, bebieron del agua donde aquél desgraciado murió ahogado?

Facebook: Crónicas de Terror en Chihuahua

Con un huérfano volante de coche asido a sus manos, un curioso individuo rondaba las calles de Ciudad Juárez durante la década del 40. El colorido personaje llevaba puesto un sombrero aplanado y una desgastada ropa más parecida a trapos rasgados y traslúcidos que a prendas.

➡️ Recibe las noticias más relevantes de Chihuahua, Juárez y Parral directo a tu correo electrónico. ¡Suscríbete a nuestro Newsletter!

De norte a sur, de este a oeste, el llamativo sujeto poco a poco comenzó a volverse parte de la postal urbana. Entre el lujo ostentoso de los pachucos, el bullicio de los vendedores ambulantes y los turistas estadounidenses que llegaban desde El Paso, el Loco Police, como suele pasar a ciertos individuos en sus condiciones, comenzó a tomar estatus de monumento viviente a la inocencia y a la locura.

Aquella mágica locura que de su peculiar habito emanaba, terminó volviendo cómplices a los conductores de auténticos vehículos, quienes al verle caminar en medio de la calle con aquel gastado volante en mano, hacían alto y le permitían pasar, como si en un invisible Rolls Roice se desplazara.

Incluso los transeúntes, contagiados por el comportamiento del individuo, de vez en cuando lanzaban un grito y pedían al “conductor” manejar con más cuidado para que no los fuera a “atropellar”.

Con el paso del tiempo, sus largos recorridos comenzaron a reducirse, una vez que la fama local le trascendió, hasta el punto en que lo cotidiano era encontrarle rondando únicamente por las calles de la zona centro de la ciudad.

Era allí donde pedía a los ciudadanos dinero para subsistir. A veces sentado en el exterior de la Presidencia Municipal, estiraba su mano y clamaba a los transeúntes misericordia para sortear el hambre un día a la vez; la sed, la saciaba bebiendo del viejo depósito de agua que surtía la zona y estaba ubicado en los patios del mismo edificio municipal, a donde, a escondidas, trepaba y cargaba un recipiente que llevaba siempre consigo para mitigar el estío del desierto.

Su desaparición fue súbita. Los ciudadanos y turistas acostumbrados a su presencia pronto comenzaron a echarle de menos. Nadie tenía piste de dónde podría estar.

La ciudad ya no era lo mismo sin él, pero al cabo de unas semanas, todo el mundo dejó de pensar en él, quizás creyendo que finalmente había sido apoyado por algún generoso ciudadano que le habría ayudado con un techo y alimento.

Pero no pudieron estar más lejos de acertar. Fue la pestilencia en las cercanías del Municipio así como el hedor del agua que brotaba de las llaves de los negocios y viviendas aledañas lo que delató la ubicación del infeliz sujeto.

Cierta noche, cuando todos los empleados del edificio se habían retirado, el Loco Police se dispuso, como de costumbre, a rellenar su ánfora con agua, sin embargo, accidentalmente cayó dentro del depósito, donde murió ahogado.

Cuando lo encontraron sin vida en esa cisterna, su cuerpo estaba ya en avanzado estado de descomposición. El depósito metálico fue desmantelado por órdenes de la presidencia municipal, y su hallazgo se manejó con total hermetismo. Incluso quienes se enteraron en su momento prefirieron no volver a hablar de ello hasta después de varias décadas, cuando casualmente la verdad salió a la luz.

¿Cuántas personas, sin sospecharlo, bebieron del agua donde aquél desgraciado murió ahogado?

Facebook: Crónicas de Terror en Chihuahua

Chihuahua

Federación impulsa política de exterminio al campo: Unión Campesina Democrática

“Lejos de incentivar la producción se está fomentando la importación de alimentos”, aseguró Jesús García, dirigente de la Unión Campesina Democrática en Chihuahua

En el ring

"Quiero pelear con los mejores": Reta el boxeador parralense Óscar Duarte a Devin Haney

Óscar asegura que tiene la capacidad de noquear a Devin Haney, ya que su “estilo mexicano” es muy marcado, además, confiado de su pegada

Parral

Registra región sur 273 suicidios en seis años; intensifican campañas preventivas

Los casos se contabilizan desde 2019 hasta septiembre de 2024, del total 49% corresponde a jóvenes y niños

Juárez

Prevé Canacintra Juárez un cierre de año económicamente desfavorable en la industria

La titular de la Cámara enfatizó que la situación de la maquiladora que está en huelga agudiza la crisis económica en el sector de exportaciones

Salud

Aumenta casi 12% demanda de rehabilitación por consumo de alcohol en Chihuahua

El Observatorio Mexicano de Salud Mental y Adicciones señala que del total de atenciones, 3 mil 066 corresponden a hombres y 584 a mujeres

Chihuahua

Proyectan convertir el Centro Comunitario de Riberas de Sacramento en Cedefam en 2026

Otro centro que también fue identificado como potencial para convertirse en Centro de Desarrollo Familiar en los próximos años, es el que se encuentra ubicado en la colonia Dale