Con la “Despedida a las ánimas a la usanza rarámuli”, la tarde noche de este miércoles continuaron las actividades del “Festival Cempaxúchitl; tradición de flor y canto”, que la compañía chihuahuense Teatro Bárbaro desarrolla en su segunda edición.
El evento, realizado en las instalaciones del propio foro de Teatro Bárbaro, ubicadas en el número 111 de la calle Doblado, en la colonia Centro, contó con una buena asistencia, deseosa por presenciar un ritual que muy poco se ve en el ámbito urbano, pareciendo estar reservada para las montañas de la Sierra Tarahumara.
A diferencia de los rituales de Día de Muertos comunes en la cultura mestiza mexicana, las ofrendas rarámuri no buscan atraer las almas de los muertos, como podría ser, por citar un ejemplo, la idea del altar y sus ofrendas.
Todo lo contrario. De acuerdo con la cosmovisión de la etnia de los pies ligeros, se despedir a las ánimas y de ser posible, dotarlas con lo necesario para su viaje hacia el otro mundo, buscando en la mayoría de las ocasiones hacer una celebración festiva de ese adiós a los seres queridos, sin que por ello pierda solemnidad lo que se hace.
Siendo la música es un elemento casi infaltable en este tipo de ceremonias, la que tuvo lugar este miércoles en el corazón del Centro Histórico de la ciudad contó con la voz del cantor Camilo Espino, así como con las notas al violín de Esteban Carrillo.
Complementando esta actividad y el desarrollo del mencionado Festival, se contó asimismo con exposición y venta de libros, artesanías y arte tradicional mexicano así como degustación de café y pan como para corroborar aquello que se dice de la cocina de nuestro país, que es capaz de regresar a los muertos de sus tumbas para seguir comiendo.
Sin embargo, aún hay más de “Cempaxúchitl; tradición de flor y canto”, pues este jueves, viernes y sábado subirá a escena la obra “Voces en el umbral”, que desde luego es acorde a la temática del festival y, por ende a la tradición del Día de los Fieles Difuntos, que se celebra el próximo 2 de noviembre.
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Original del dramaturgo chihuahuense Víctor Hugo Rascón Banda, “Voces en el umbral” es una historia de opresión es contada por dos mujeres acompañadas de sombras y fantasma: una metáfora entre el mundo de los vivos y el de los finados.
Igualmente, otra de las actividades destacadas del II Festival Cempaxúchitl; tradición de flor y canto, es el taller de cartonería que los maestros Tita Bilbao y Enrique Zárate imparten los martes y miércoles restantes de octubre, de 4:00 a 7:00 de la tarde.
Esta capacitación, apta para público de todas las edades, tiene como objetivo principal el desarrollar las habilidades artísticas de los asistentes, así como fortalecer en los mismos las tradiciones y costumbres del país.
Asimismo, contribuir con el rescate de las tradiciones, celebraciones y técnicas artesanales mexicanas, a través de la adquisición de esta habilidad creativa para poder realizar los ornamentos correspondientes en el marco del Día de Muertos.
Cabe mencionar que, durante las actividades de la noche de este miércoles se recordó a Natalia Corral Rico, joven actriz y destacada e incansable promotora cultural, quien se adelantó en el camino el pasado mes de julio.