El público chihuahuense amante del buen teatro puede sentirse afortunado porque la agenda de la compañía regiomontana Gorguz Teatro coincidió en su visita a Chihuahua con los días previos a las fiestas patrias, en los cuales el orgullo por ser mexicano le sale a cualquiera por los poros.
Durante el jueves, el viernes y el sábado, esta ciudad tuvo noches regias al doble, pues no sólo los actores que deleitaron al público con la presentación de la obra “El ejército iluminado” tienen su centro de operaciones en Monterrey, sino que el mismo texto está basado en la novela del también nacido en la capital neolonesa, David Toscana.
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De hecho, puede decirse la representación que tuvo como escenario el Teatro de Cámara Fernando Saavedra pocas cosas le pide a la mencionada obra literaria, e incluso los intérpretes “se dan el lujo” de romper la cuarta pared en algún momento del montaje para recomendar la lectura de aquella, si se quieren saber más detalles de la historia.
Una trama bien pensada presenta las aventuras (y no pocas desventuras) de un grupo de personas que se disponen a atravesar el Río Bravo para recuperar el territorio de Texas, perdido desde la tercera década del siglo antepasado.
La dirección de la pieza corrió a cargo de Alberto Ontiveros, quien tuvo una breve intervención actoral casi al finalizar la misma, y luego del desenlace, fue el encargado de presentar a su genial cuadro de histriones y agradecer la calidez del público local.
Retomando la historia, el peculiar ejército lanzado a una misión ten imposible como suicida se compone por un puñado de seres patrióticos dispuestos a entregar la vida, y que a lo largo de casi dos horas derrochan un perfecto equilibrio entre la inocencia y la picardía.
La gente pasó ese lapso entretenida con las ocurrencias de un joven tan pasado de peso como fantasioso y su pretensa, una niña que cambiará sus colores escolares por la causa, así como un artista frustrado, un sobreviviente a una tragedia y un niño somnoliento.
Excelente trabajo de equipo del primer actor Francisco De Luna, Rosalva Eguía, José Olivares, Ricardo Traviezo, Cassandra Colis, Germán Navarro y Emmanuel Pichardo, así como Esaú Corona en el diseño de iluminación.
