El punto de cocinado de los cortes de carne varía para cada consumidor en función de los gustos personales, así como de la región o país. Para satisfacer estos gustos, la temperatura interna de la carne lograda con el cocinado puede variar considerablemente.
Sin embargo, cuando se trata de carne molida, las reglas son diferentes. Todos quieren hamburguesas perfectas, pero más allá de la receta, el tiempo de cocción de la carne es esencial para alcanzar el punto ideal y evitar hamburguesas crudas, secas o, peor aún, que puedan causar una infección. La razón científica para cocinarla, es hacerla más digerible y apetitosa, además de eliminar los microorganismos, principalmente patógenos, que pueden estar presentes y representar un riesgo para la salud. Aquí te decimos cómo se debe cocinar la carne de hamburguesa.
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La temperatura ideal para cocinar la carne para hamburguesa
En la gastronomía existen diferentes puntos de cocción de la carne que influyen directamente en su degustación, Armida Sánchez Escalante, académica del Centro de Investigación en Alimentación y Desarrollo (CIAD) explica que, a temperaturas de cocción más altas, se pierden más nutrientes, especialmente las vitaminas complejo B presentes en la carne. Además, al freír, la carne se deshidrata debido a la evaporación del agua, lo que afecta su calidad, volviéndola más seca y dura.
Algunos ejemplos de puntos de cocción de la carne son el “blue” o “azul”, en el que la carne queda sellada por fuera y cruda por dentro o el “rojo inglés”, donde la carne queda ligeramente más cocida.
Para los cortes de carne el punto de cocinado varía dependiendo en el gusto de las personas, la región o el país, sin embargo, en el caso de la carne molida, la cosa cambia.
Rafa Carbajal, el experto en biotecnología en alimentos y tiktoker señaló en un video que todos los alimentos hechos con carne molida deben consumirse de preferencia bien cocidos.
Es importante asegurarse de que la carne de hamburguesa alcance una temperatura interna segura antes de consumirla. Para la carne molida de res, la temperatura ideal es de 71.1°C, medido con un termómetro de alimentos, indica el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos.
Esto se debe a que, al mezclar la carne molida, los microorganismos de la superficie pueden terminar dentro de la hamburguesa. Si no cocinas la carne a una temperatura adecuada, ésos microorganismos podrían sobrevivir y causarte una infección.
A diferencia de los cortes enteros, las hamburguesas se hacen con carne molida. La contaminación microbiana generalmente se encuentra en la superficie expuesta, mientras que el interior del músculo es en su mayoría estéril.
La carne molida cruda puede contaminarse con microorganismos que generan toxinas, como Shiga, Escherichia coli (que causa el síndrome urémico hemolítico) y Salmonella, los cuales pueden provocar enfermedades graves.
Así debes cocinar la carne para hamburguesa
Como mencionamos anteriormente, la carne de hamburguesa se debe cocinar a 71.1°, por lo que puedes medir la temperatura interna con un termómetro para carne, solo deberás insertarlo en el centro de la carne para checar la temperatura más baja posible. Si no tienes uno, puedes cortar una abertura para ver si la carne ya se coció.
Si vas a utilizar una parilla para hacer la carne de la hamburguesa, sigue estos pasos:
- Calienta la parrilla a temperatura media-alta por unos 10-15 minutos.
- Coloca las hamburguesas en la parrilla caliente, dejando un espacio de 2.5 cm entre cada una.
- Cocina por 4-8 minutos y luego voltea con una espátula.
- Cocina por otros 4-8 minutos hasta que la temperatura interna alcance los 71°C.
- Si deseas añadir queso, hazlo en los últimos 2 minutos de cocción.
Un tip es voltear la hamburguesa solo una vez durante la cocción y evitar presionarla con la espátula, así mantendrás su jugosidad.
