Desde el inicio de la pandemia del Coronavirus, el cubrebocas se ha vuelto parte indispensable de nuestras vidas, un accesorio más del outfit del día a día, pero ¿Qué mascarilla es la ideal para una mejor protección?
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La función del cubrebocas es evitar el contagio microbiológico que se transmite por la nariz y la boca; sin embargo, con la psicosis generada a causa de la pandemia, la venta de mascarillas se disparó, a grado de que comenzaron a fabricarse de distintos materiales, entre los cuales muchos no sirven para protección.
Toda mascarilla para brindar mayor protección debe tener al menos dos capas de tela, y ajustarse bien al rostro y nariz. Hay cubrebocas de alta eficiencia que se utilizan en los hospitales, ya que son lugares de alto riesgo de contagios.
Asimismo están también los cubrebocas "civiles" que impiden que se expulsen gotículas con partículas virales a la atmósfera explica Carlos Alberto Pantoja Meléndez, responsable del Proceso de Información de Inteligencia Epidemiológica de Covid-19 del Departamento de Salud Pública (DSP) de la Facultad de Medicina de la UNAM.
Pantoja Meléndez explica que la infección no se da a partir del contacto con una partícula viral, sino que tiene que haber una carga suficiente de ellas, lo que se conoce como carga viral, precisamente para eso sirven los cubrebocas, para que la expectoración de las gotículas sea la menos posible.
¿Cuál cubrebocas brinda mayor protección a las personas vacunadas?
Expertos aseguran que usar máscaras como las KN95 o N95 son de mayor protección porque son muy efectivas para filtrar partículas virales. En dichas mascarillas el "95" refiere a que la eficacia de la filtración contra las partículas es del 95%, por lo que brindan más seguridad.
No obstante, el uso del cubrebocas no es la única medida sanitaria para protegernos del contagio del Covid-19, sino también evitar el contacto directo con las personas, como el saludo de mano o beso (aunque se porte cubrebocas), así como mantener una distancia de 1.5 metros y el lavado frecuente de manos.
Si bien, los casos y defunciones han ido cediendo gracias a las vacunas, estas no previenen al 100 por ciento los contagios, el virus llegó para quedarse y no sabemos hasta cuándo será el momento indicado para dejar de usar cubrebocas, así que será mejor seguir cuidándonos y cuidando a los demás.