La historia de la onza varía de pueblo en pueblo, pero generalmente es descrito como un felino muy agresivo de grandes dimensiones, de forma alargada y con un rabo de pelos en la punta de su cola, mientras que algunos opinan que se trata de una entidad demoníaca.
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México posee muchas criaturas de leyenda, algunas bastante conocidas como la llorona y el chupacabras, pero en esta ocasión, hablaremos de un mítico felino que ha asustado a los rancheros desde hace generaciones y según se cuenta, deambula por las zonas más inhóspitas de la sierra.
Desde los tiempos de la conquista, los primeros exploradores españoles escuchaban relatos de los indígenas, narrando horrores sobre la bestia conocida como "La onza real", un enorme felino que habitaba en los bosques y selvas de México, y disfrutaba al devorar personas.
¿Qué es la onza?
"Se trata de un gato muy grande, cuyas patas delanteras están armadas con fuertes garras. Puede saltar más de diez metros, y su mandíbula es capaz de romper huesos humanos, suele alimentarse de tripas y bofes. No sabe rugir, pero emite un sonido semejante al llamado de una mujer y llora de gusto una vez que ha saciado su truculenta hambre", reza la descripción dada por un indígena sobre la onza.
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Cuentan que es un terrible animal de color oscuro y rayas negras, con la punta de la cola negra, el cual suele comerse los órganos internos de aquellos humanos a los que caza, dicen que suele merodear en algunas zonas del norte del país, en estados como Coahuila, Durango y, sobre todo, en Chihuahua.
Los ancianos de la sierra solían contar historias sobre la onza a sus nietos, con el fin de sacarles un buen susto cuando se portaban mal. Aún en regiones como Urique y Madera, es posible escuchar de vez en cuando, sobre posibles avistamientos de esta criatura desconocida, los cuales ponen a temblar a todos aquellos que saben algo sobre esta.
La onza en la vida real
Gracias a los investigadores de la vida silvestre, hoy sabemos que la onza existe en realidad, pero lejos de ser una bestia sanguinaria, se trata de uno de los felinos más misteriosos y esquivos que habitan la Sierra Madre Occidental.
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El nombre completo de este animal es herpailurus yagouaroundi, mejor conocido como yaguarundí, onza o leoncillo de monte. También conocido como gato nutria, es un felino pequeño, de tamaño similar a un gato doméstico, con un pelaje oscuro y orejas más redondeadas que las de otros felinos.
Su dieta está compuesta de pequeños mamíferos, así como insectos y aves; no obstante, en ocasiones pueden consumir materia vegetal, eso sí, definitivamente no cazan humanos para alimentarse, sino por el contrario, suelen huir de ellos.
La onza en realidad está bastante extendida por todo el continente americano, habitando desde el sur de Texas hasta Argentina; sin embargo, debido a la caza ilegal y a su comportamiento solitario, es un animal observado rara vez. Incluso, se dice que es uno de los felinos menos estudiados, por lo que aún se sabe poco sobre esta especie.