¿Sabías que en Chihuahua se encuentra uno de los sitios con mayor contaminación por metales en Latinoamérica? Se trata de la Planta Ávalos en Chihuahua, que tras su cierre dejó graves daños tanto para el suelo, como para la salud de los habitantes de la zona.
La planta Ávalos fue en su momento una fundidora de metales; este sitio se encuentra ubicado al sureste de Chihuahua capital, en específico en el boulevard Fuentes Mares y Francisco Portillo, en la colonia Villa Juárez.
Además de ser uno de los sitios más contaminados, también esconde en su historia algunas leyendas que, sean ciertas o no, nos ponen la piel de gallina.
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¿Cuál es la historia de la Planta Fundidora Ávalos?
La Planta de Ávalos era propiedad de la empresa American Smelting and Refining Company (ASARCO) y comenzó a operar en 1908, produciendo en ese momento 600 toneladas métricas por día de plomo “bullion”. Tras su producción, éste era enviado a Monterrey para ser refinado.
Este lugar, además de fundir plomo, tenía una planta de flotación donde concentraba todos los minerales sobrantes.
Durante 1923 ASARCO transfirió sus activos a la Compañía Minera Asarco, que ya era una empresa mexicana con acciones de Estados Unidos. Posteriormente, en 1967 cambió su nombre a Asarco Mexicana y en 1974 realizó un cambio más, quedando su nombre como Industrial Minera México.
A pesar de que durante muchos años fue la minera más poderosa del país, a finales de los 90, en específico en 1997, la compañía cerró sus operaciones definitivamente debido a la reducción de suministro de concentrados de plomo en las minas.
Planta Fundidora Ávalos dejó altos niveles de contaminación en el suelo
Luego de un tiempo de su cierre, se realizaron estudios en la Planta y en zonas aledañas para determinar los residuos de metales que había en la zona.
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Los resultados fueron desalentadores, pues arrojaban que la fundidora había generado un grave daño ambiental y grandes niveles de contaminación en el suelo; en el sitio se encontraron restos de arsénico, plomo y cadmio.
Estos elementos son altamente tóxicos y se asocian al deterioro del sistema inmunológico, además de que provocan otras afectaciones graves a la salud.
A pesar de que el lugar no es apto para vivir, en el 2004 se empezaron a construir áreas deportivas, recreativas e inclusive zonas habitacionales.
Quienes viven en los alrededores de la zona, han manifestado dolores intensos de cabeza, perdida de memoria, dolor de huesos, sangrado nasal, manchas en la piel e inclusive se sabe de casos de cáncer.
Entre el 2015 y el 2016 se realizó un programa que trataría de remediar el impacto ambiental que dejó la fundidora, intentando así, disminuir los efectos en la salud de las personas, sin embargo, aún no se ha concluído el proyecto.
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Actualmente, el lugar donde estuvo instalada la Planta Fundidora Ávalos, no tiene ninguna función en específico, sin embargo, una parte del terreno que formó parte de ella, fue renovado y ahora se utiliza para festivales o exposiciones del estado, como la Feria de Santa Rita, ExpoGan, entre otros.
La otra parte del predio de la fundidora, aún mantiene en su interior, las ruinas de la Planta y dentro se encuentran residuos de metales peligrosos y por consiguiente, altos niveles de contaminación en los suelos.
Además de toda la contaminación que guarda la explanta fundidora y sus alrededores, también tiene una leyenda tenebrosa que atemoriza a cualquiera.
Leyenda de la Planta Fundidora Ávalos
Se dice que hace varios años, cuando la fundidora aún estaba en funcionamiento, ocurrió un accidente que dejó a decenas de fallecidos que aún rondan por el lugar.
Cuentan que en una ocasión el sitio ardió en llamas y decenas de trabajadores murieron calcinados, entre ellos un joven que tenía poco tiempo de haberse casado.
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La esposa de este hombre, buscaba contactarlo en el más allá, por lo que con ayuda de una médium entró en la madrugada al lugar donde el incidente ocurrió.
Una vez estando ahí, lo llamaron por medio de un ritual, posteriormente, el alma del difunto entró en la médium y luego de hacer extraños sonidos e intentos de palabras, dijo “Soy yo”.
La esposa del fallecido le preguntó que cómo estaba y él le contestó “aún me estoy quemando”; ella aterrorizada, decidió terminar con el ritual y el alma del hombre salió de la médium. Se dice que luego de ello, la mujer se hundió en una terrible depresión y falleció años después
Hay quienes dicen que las almas de los fallecidos continúan caminando por los rincones de lo que fue la ex Planta Fundidora Ávalos.
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