Hoy en día son muchas las historias de la ciudad fronteriza que han desaparecido, así como muchos edificios que albergaban anécdotas que se perdieron y de que ahora solo conocemos una pequeña parte de ella.
Ciudad Juárez fue parte fundamental durante la época de la Revolución Mexicana, siendo además la frontera en donde el presidente Benito Juárez se refugió de los franceses, llegando al entonces Paso del Norte, lugar en el que gobernó el país.
La historia de la garita entonces se remonta a 1889, cuando se inauguró la aduana fronteriza (hoy Museo de la Revolución) sobre la hoy calle 16 de Septiembre, y casi treinta años después, en la década de los veinte, fue construida la Garita de Metales, entre la avenida Vicente Guerrero y la avenida Francisco Villa, a escasos metros de la aduana, a un costado de las vías del tren.
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A este edificio se le conoce como Garita de Metales porque fue ahí en donde se inspeccionaban los vagones que llevaban metales con dirección a El Paso, ya que llegaban del resto del país y, en palabras del historiador José Luis Hernández, solían esconder oro y plata debajo de los escombros.
De este edificio se aprecia especialmente que su diseño se encuentra basado en la edificación francesa, estilo del que Porfirio Díaz tuvo gran admiración y pidió construir tanto en Ciudad Juárez como en la Ciudad de México, poco tiempo antes de que fuera destituido como presidente.
Hay incluso relatos, en los que se narra que fue en este edificio en el que Porfirio Díaz finalmente dejó su cargo, a diferencia de otros, que señalan que fue en la antigua Aduana Fronteriza; sin embargo, fue ahí en donde tuvo su primera entrevista con el periodista James Creelman.
¿Qué le pasó a la Garita de Metales?
La garita, junto con la aduana fronteriza al mismo tiempo, terminó sus funciones, siendo ahora un edificio que se conservaba como un recordatorio histórico del que fue Ciudad Juárez, albergando en su interior cientos de documentos que validaban toda la historia del país desde finales del siglo XIX.
Sin embargo, y como cientos de historias que se perdieron en la ciudad, este tesoro histórico se incendió durante la administración del ex alcalde Enrique Serrano en 2010, temporada en la ciudad la violencia y los grupos delictivos se encontraban al orden del día, temporada en donde además, muchos edificios fueron incendiados.
La Garita de Metales continúa en el mismo lugar desde hace más de 130 años, aunque tras el incendio, fue reconstruido y actualmente se encuentra resguardada por un barandal que lo rodea, en un intento por conservar los pocos recuerdos históricos de la edificación.
Nota original de El Heraldo de Juárez