Con respecto a la celebración del Día del Brujo, que se lleva a cabo cada primer viernes de marzo, podemos pensar que no es compatible con el norte, pues al hablar de brujos, lo asociamos más a Catemaco, Veracruz, municipio conocido por ser el lugar de residencia de brujos, hechiceros, curanderos y más personas del mundo místico.
Pero ¿alguna vez has escuchado que Naica es la capital de las brujas? Los lugareños de este pequeño pueblo minero, que es conocido internacionalmente por su cueva, a la que llaman “Cueva de las Espadas”, aseguran que el lugar es el centro de aparición de bolas de fuego, las cuales afirman, se tratan de brujas.
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La leyenda de las Brujas de Naica
Naica es un pueblito minero ubicado en el municipio de Saucillo, que no solo es atractivo por su cueva de los cristales, sino porque alberga una enigmática y siniestra leyenda: se trata del hogar de las brujas. Según cuentan los residentes de la comunidad, pasadas las 10:30 de la noche, es mejor no salir de casa, pues te puedes encontrar con unas bolas de fuego que salen de las minas del lugar y dicen que se trata nada más y nada menos que de brujas.
Afirman que las brujas salen para capturar a las niñas del lugar y convertirlas también en brujas por el resto de su vida. Una de las leyendas cuenta que hace mucho tiempo, una mujer que trabajaba en la panadería local fue al lago cercano, como se distrajo por mucho tiempo admirando el bello paisaje, dieron las 10:30 de la noche, hora a la que salen las brujas. La joven mujer no llegó a tiempo a su casa a resguardarse por lo que fue atrapada por una de esas misteriosas bolas de fuego. Desde ese día, no la volvieron a ver bajo su forma humana, algunos aseguran habérsela encontrado demacrada y deforme, igual a como se describe normalmente a las brujas.
¿Por qué el primer viernes de marzo se celebra el Día del Brujo?
Desde que cae la noche del jueves y durante la madrugada del viernes, grupos de hechiceros, curanderos y adivinos se reúnen en las orillas de la laguna de Catmeaco. Danzando al son de ritmos prehispánicos u orientales, esperan la apertura del portal energético, el cual solo se abre el primer viernes de marzo.
Conocido como el Día del Brujo, el primer viernes de marzo se celebra esta fecha tan importante para todas las personas que manejan o creen en la energía (ya sea blanca y negra). Los chamanes, hechiceros, brujos, curanderos y adivinos preparan sus rituales y una misa negra.
Para los creyentes de lo místico, durante todo este día se abren las puertas de la energía o de “El Encanto”, el lugar donde reside “el señor de El Encanto”, que es a quién le rinden cuentas por todo lo que han hecho durante el año pasado, además de que le piden por la purificación del alma y su ayuda para eliminar todo mal.
Con la apertura de este portal, las personas que manejan las energías se recargan de ellas; realizan rituales, limpias y una misa negra, que llevan a cabo a escondidas de los curiosos. Esta misa no se relaciona con cultos satánicos, sino que se trata de un rito de purificación en donde se limpian las malas energías que han retenido de sus clientes, sin embargo, algunos brujos negros sí hacen una misa negra para renovar su pacto con el diablo.
