El estado de Chihuahua registra 146 casos nuevos de trastornos alimentarios, entre la primera semana de enero a la primera semana de julio de 2024, según Datos Abiertos de Enfermedades y Trastornos de la Alimentación del Sistema Único de Información de Sinave.
Del total de casos referidos, 117 se han presentado en mujeres y 29 en hombres, esto significa un caso en hombres por cada cuatro en mujeres.
La información abarca como trastornos alimentarios, la bulimia, anorexia y otros en los que entran aspectos como la restricción de ciertos alimentos, el uso de laxantes, fármacos para bajar de peso.
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A nivel nacional, está problemática de salud se presenta en 2 mil 588 casos en el periodo señalado en 2024, de los cuales 1,943 son en mujeres y 645 en hombres, que significa que por cada caso en hombres, se registran tres en mujeres.
La doctora Ana Rosa García cirujano y especialista en psiquiatría, refirió que la psicopatología alimentaria, se presenta cuando existen conductas alimentarias de riesgo, "asociadas al deseo de conseguir o mantener una figura corporal delgada y estas son desadaptativas o patológicas".
Mencionó que ese deseo de conseguir una figura corporal delgada, está relacionado con los parámetros o estereotipos, como la delgadez extrema.
En el caso de los trastornos de la conducta alimentaria, dijo que hace referencia al "grupo heterogéneo de trastornos mentales que se caracteriza por un comportamiento patológico, frente a la ingesta alimentaria y una posible obsesión por el control de peso".
Citó que puede considerarse, que esas conductas de riesgo, pueden considerarse como la antesala o el primer paso para desarrollar posteriormente un trastorno de la conducta alimentaria.
“Nos referimos ya a un trastorno, cuando se presenta una patología, cuando se presenta una enfermedad en las personas, asociada al miedo intenso para ganar peso; cuando se presentan conductas que son patológicas o desadaptativas para mantener un peso; la inducción del vómito, el limitar la ingesta de algunos alimentos y cuando se va a tener una serie de conductas también para evitar esa ganancia, como puede ser la toma de algunos medicamentos, sin indicación médica, que además pueden ser un riesgo para la salud”.
Abundó que la conducta alimentaria, es de los padecimientos que tienen una mayor tasa de heredabilidad, es decir, podemos tener un mayor riesgo de presentar alguna patología cuando nuestros familiares en primera línea lo han presentado previamente; también alteraciones en los sistemas de neurotransmisores, particularmente la serotonina, como llega a suceder con los pacientes con trastornos de ansiedad o con trastornos depresivos van a estar asociados a esto.
En muchas ocasiones, señaló, confundimos la nutrición con la dieta y la alimentación, y dijo que estos procesos son los que tiene el cuerpo para utilizar, transformar y poder incorporar todos los nutrientes que ingerimos a través de la dieta y que va a tener una función particular en la parte de generar energía, para tener la posibilidad de desarrollar todas nuestras actividades, además de la formación y reparación de todos los tejidos en el cuerpo, como parte fundamental en el concepto de salud.