Los trastornos de la alimentación en el estado de Chihuahua, aumentaron entre 2021 y 2022, al pasar de 284 a 378 casos de jóvenes de entre 18 y 27 años, con bulimia y/o anorexia.
Mientras tanto, en 2023 son 98 casos nuevos los que están documentados en el registro de Enfermedades no Transmisibles del Sistema Nacional de Vigilancia Epidemiológica.
Refiere que los casos se atienden como Trastornos de la Alimentación, pero de manera consecuente, el 53 por ciento es atendido por presentar desnutrición leve.
Además, se indica que un 20 por ciento, registró desnutrición a nivel medio y un 6 por ciento, fue desnutrición avanzada.
Dentro de estos casos, que abarcan la edad de 18 a 27 años, la mayor parte oscila entre los 18 y 22 años, aunque en este registro no abarca a personas menores de 18 años.
Las características de personas que acudieron a ser atendidas, fueron bajo peso, dificultad para dormir, fatiga o debilidad, falta de concentración, depresión y ansiedad.
Del total de casos, ademas, un 74 por ciento son de mujeres, lo que indica una prevalencia notablemente mayor a los casos de varones.
Pese a lo anterior, la estadistica indica que hace todavia seis años, el 94 por ciento de las personas que acudían por este tipo de trastornos eran mujeres.
En este sentido, se observa una mayor presencia de trastornos de la alimentación en hombres, aunque la cifra tambien indica que hoy en día son más los que buscan ayuda profesional.
Respecto a otras características fisicas, las personas con problemas alimentarios de este tipo presentaron, coloración amarillenta de piel, uñas delgadas, cabello quebradizo y sequedad en boca.
Con el objetivo de disminuir los casos y prevenir trastornos de esta naturaleza, la Subdirección de Epidemiología de Salud Federal, exhorta a estar pendientes en el comportamiento de adolescentes y jóvenes en cuanto a su alimentación.
Algunos signos que pueden alertar, es que comiencen a bajar de peso o auto imponerse dietas excesivamente restrictivas.
Tambien puede ser un indicativo, que las y los menores coman aparentemente "normal", pero en realidad se deshacen de la comida, guardándola en papel y en casos de bulimia, induciendose el vómito.
Se exhorta a acudir a un profesional de la salud para que diagnistique cualquiera trastorno de alimentación, ademas de orientar sobre cómo llevar una dieta balanceada.