El Informe Trimestral del Sistema de Vigilancia Epidemiológica de Defectos al Nacimiento del primer trimestre de 2024 reporta que el estado de Chihuahua registró 11 casos de recién nacidos con algún defecto al nacimiento, y una tasa de 76.9 casos por cada 100 mil.
El informe emitido este mes de mayo, concentra datos de las 32 entidades federativas, abarca los meses de enero, febrero y marzo del presente año y muestra que a nivel nacional, se notificaron 706 casos, con una incidencia de 138.2 por cada 100 mil recién nacidos vivos.
Además, Yucatán y Morelos reportaron las incidencias más altas en el país, con 326 y 316 casos (por cada 100 mil recién nacidos vivos) respectivamente.
Este informe describe el panorama del Sistema de Vigilancia Epidemiológica de los Defectos al Nacimiento en México y el comportamiento de algunos factores de riesgo, relacionados con la ocurrencia de los mismos.
Por ejemplo, de manera general, la mayor incidencia de madres de bebés con este tipo de afecciones, se observó en menores de 20 años (adolescentes).
La diabetes y la obesidad, fueron las enfermedades crónicas más frecuentes en las madres, y esta misma condición fue la más común en padres varones de niños con este tipo de problemas de salud
En cuanto a las consultas de atención prenatal, la media nacional fue de 6 consultas y el 70.5% refirió recibir al menos una consulta durante el primer trimestre del embarazo.
La ocupación materna más frecuente de los casos fue el hogar con el 74.9%; mientras que, en los padres, fue la agricultura con el 16.8%.
Embarazo antes de 20 años, obesidad, diabetes y uso de sustancias nocivas; factores de riesgo
Por tipo de daño relacionados con el tubo neural, la anencefalia fue el defecto más frecuente con una incidencia de 11.55 casos por cada 100 mil recién nacidos vivos.
En lo que respecta a los defectos cráneo- faciales, el labio y paladar hendido ocupó el primer lugar, con una incidencia de 51.1 casos por cada 100 mil recién nacidos vivos.
El informe expone algunas consideraciones sobre las incidencias, por ejemplo, en el caso de la Anencefalia, éste fue el defecto del tubo neural más frecuente y entre los factores de riesgo que pudieron haber influido en su desarrollo, 44.6% de las madres de esos bebés tenían menos de 20 años o más de 35 años.
Un 8.9% dijo tener alguna adicción; el 10.7% dijo padecer alguna enfermedad crónica; 3.5% refirió tener exposición a tóxicos o medicamentos y 1.7% tuvo antecedente de padre o madre con defectos congénitos.
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Además el 44.6% de las madres de niños con defecto al nacer, no tomó ácido fólico o empezó a tomarlo después del primer trimestre del embarazo.
Dentro de los defectos cráneo-faciales, el de labio y/o paladar fue el más frecuente; los factores de riesgo que pudieron influir fueron en 32.8%, la madre de estos bebés eran menores de 20 años o mayores de 35.
Un 9.2% de las mamás de estos niños, dijo que tenía alguna adicción; 12.7% refirió alguna enfermedad crónica; 9.6% tuvo exposición a tóxicos; en 3.9% de los casos, había antecedentes de padre o madre con defecto congénito.
Además, 43% de las madres no tomó ácido fólico o lo hizo después del primer trimestre del embarazo.
En este informe, se hace hincapié en la gran utilidad para los tomadores de decisiones en el país y en las distintas entidades federativas. Señala que los datos proporcionados por el Sistema, deben orientar para las intervenciones enfocadas principalmente en la prevención de los defectos congénitos.
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