Más del 80 por ciento de las personas con obesidad tipo 1,2 3 ó 4, se encuentran en estado depresivo, ya que su condición, los limita para llevar a cabo cabo una vida social cotidiana, informó el médico bariatra José Rodríguez Villarreal.
Señaló que esto, ocurre debido a que las personas están deprimidas "porque tienen problemas para satisfacer todo todo lo que conlleva desde la compra de ropa, del vehículo, la movilidad, el jugar con sus hijos, todo lo que conlleva la vida social cotidiana, está limitada con un paciente con obesidad"
El especialista cuenta con 35 años de experiencia y forma parte de un grupo de 14 bariatras en Ciudad Juárez, que se confirmó desde hace 16 años.
Trabaja en Hospital Ángeles en Juárez, fue presidente del Colegio Mexicano de cirugía bariátrica y socio fundador del mismo, además de socio de la Federación Internacional de Cirugías para la Obesidad y Enfermedades Metabólicas AC. y socio de la Federación Bariátrica Internacional en Latinoamérica y Mundial.
Explicó que los pacientes con depresión pueden llegar a ser propensos al consumo de sustancias nocivas.
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El especialista, añadió que en las personas con un nivel de obesidad tipo 2, o mayor a éste, su expectativa de vida disminuye 10 años.
Las personas con obesidad, señaló, pierden movilidad y eso afecta su vida social, pues en algún momento se sienten, o son incapaces de salir a realizar actividades cotidianas.
Además, presentan problemas de salud como diabetes, hipertensión, osteoartritis, y derivado de esto, sufrir amputación o ceguera.
Señaló que actualmente, existen distintos métodos para tratar la obesidad, dependiendo el tipo o nivel de la misma y las condiciones particulares de la persona.
Sin embargo, advirtió que desde el suministro de medicamento hasta métodos como el balón o manga gástrica, deben ser aplicados por especialistas en la materia.
Agregó sobrepeso y la obesidad se determina al dividir el peso entre la superficie corporal en metros cuadrados que da como resultado el Índice de Masa Corporal (IMC) y se especifica de la siguiente manera.
El IMC de 20 a 25 es un peso normal; de 25 a 30 es sobrepeso; de 30 a 35, es obesidad 1; de 35 a 40 obesidad 2; de 40 en delante es obesidad 3.
Sin embargo ahora hay casos en los que las personas presentan un índice de masa corporal de más de 70.
Señaló que en casos de sobrepeso: "Primero tenemos el manejo dietético y el ejercicio, que eso tiene que ser por una nutrióloga que tenga un diplomado en obesidad". Además, un entrenador físico, dependiendo de las necesidades que tenga la persona.
En este punto señaló se tiene que ver en qué entorno vive el paciente, si hizo ejercicio anteriormente entre otros aspectos.
En los casos de obesidad tipo 1, en el que la masa corporal es de 30 a 35, se pueden utilizar tratamientos no invasivos como los balones intragástricos de los cuales hay de diferentes tipos.
Añadió que hay cirugías, relacionadas con aditamentos no invasivos, como las grapas por ejemplo, "pero el gran problema de este tipos de procedimientos, es que son temporales, y muchos de los pacientes, vemos que bajan de peso y al momento de retirar el balón y el medicamento, el paciente puede re-ganar peso".
Señaló que por ello, es necesario hacer un cambio cultural y de conciencia, de alimentación tomando en cuenta muchos factores, y atención de un grupo de especialistas interdisciplinario, incluidas las áreas de psicología y psiquiatría.
"Esto, porque tenemos que ver por qué la persona tiene esa desviación de todas las angustias, que está reflejada en el consumo aumentado de alimentos, tenemos que estudiarlo y llevarlo bien a cabo"
En obesidad tipo 1, entran también las cirugías permanentes, porque son pacientes que tienen problemas metabólicos, como diabetes hipertensión, apnea del sueño u osteoartritis.
"Se ha visto que si actuamos a nivel quirúrgico, la calidad de vida y la expectativa de tiempo de vida, aumentan considerablemente".
En el caso de personas con obesidad tipo 2, indicó, "hay estudios donde dicen que si ponemos a dieta y con medicamentos o procedimientos, tenemos éxito en uno de cada 400 casos entonces el nivel de éxito es muy bajo".
Señaló que la forma más fácil es por medio del método restrictivo, que se trata de disminuir el volumen de capacidad gástrica, "aquí entra la manga gástrica. Esto hace que la persona disminuya su capacidad de sentirse saciado".
Cuando esto ocurre, empieza a disminuir el peso, ya que la persona come en una cantidad mucho menor, y la energía de lo que se comió años atrás y que está guardada en el cuerpo en forma de grasa, se va gastando como energía.
Una de las contrapartes de este tipo de tratamiento, es que si la persona no sigue las indicaciones del equipo multidisciplinario, que conforman médico bariatra, psicólogos, psiquiatras, puede volver a subir de peso si comienza a consumir demasiadas calorías.
Añadió que debe que tener un control muy estrecho, por parte del grupo, para que la persona baje de peso.
Además indicó que este procedimiento no es apto para personas que tienen historia de reflujo, porque se le aumenta el problema all reducir el tamaño de estómago o su capacidad.
Mencionó que existe el tratamiento de cirugías mixto, "donde se hace una reducción del tamaño gástrico en diferentes formas, dependiendo la metodología del tratamiento o nos brincamos o 'bypasseamos' una parte del intestino delgado, para que la porción se vea disminuida".
Aquí entra desde el bypass gástrico, hasta otros métodos más sofisticados.
"La idea, es que que la persona, coma poco y que absorba el 50 por ciento de lo que come, que hace que el peso disminuya y en el primer año o año y medio, el paciente llega a perder hasta el 80% del sobrepeso que presenta. Además este se mantiene por más tiempo está condición"
Este tipo de cirugías mixta, se utilizan en los casos de pacientes con diabetes, y funcionan exitosamente, ya que al consumir menor cantidad de alimentos, también disminuye la glucosa en la sangre. Y entonces la cantidad de insulina que se produce es de buena calidad y hace su función correcta".
Al igual que se controla la diabetes, se controla la hipertensión y dolor por problemas por osteoartritis.
El especialista informó que desde hace más de 10 años "nos incorporamos a la Comisión para la Certificación de Médicos y Especialistas. El cirujano bariatra tiene que estar certificado como cirujano general, después de esto, tiene que hacer un curso de un año, para lo cual hay varios centros en la República, que determine que estamos avalados".
Señaló que las condiciones para poder hacer este curso, es estar afiliados a una universidad, que tenga recursos para que maneje especialistas.
"Tenemos un programa con el Colegio Mexicano Cirugía General y con la Federación Internacional de Latinoamérica y Mundial".
Una vez que se realizan los exámenes para poder trabajar en este ramo, se entregan diplomas donde se avala que los médicos están autorizados para practicar cirugía bariátrica.
"Si uno va con un cirujano, se debe fijar que tenga certificado como cirujano general y como cirujano bariatra".
Excuso, "eso es lo que nos da la certeza de que está preparado y legalmente autorizado, y actualizado, para que nos dejemos operar", lo que indicó, debe ser en todas las especialidades.
