Chihuahua es la segunda entidad del país más endeudada por habitante al cierre del tercer trimestre de 2022, con 12 mil 839.80 pesos por cada chihuahuense, según informe del Centro de Estudios de las Finanzas Públicas (CEFP).
Esto significó una variación anual del 1.20%, puesto que en el año 2021, cada ciudadano en Chihuahua adeudaba 12 mil 687.50 pesos.
Nuevo León, Chihuahua, Quintana Roo, Coahuila y Ciudad de México, en ese orden, son los estados más endeudados en este sentido. En tanto que Tlaxcala, Querétaro, Guerrero, Puebla, y San Luis Potosí fueron las entidades con menor deuda por habitante en dicho periodo, según el CEFP.
En el caso de Nuevo León, cada ciudadano adeuda 16 mil 745.90 pesos; en Quintana Roo, 12 mil 250.50 pesos; en Coahuila, 11 mil 558.10 pesos; y en la Ciudad de México cada habitante debe 9 mil 926.70 pesos.
Es de resaltar que Nuevo León, la Ciudad de México, el Estado de México, Chihuahua y Veracruz, concentraron 53.1% de toda la deuda subnacional al cierre del mes de septiembre del año en curso.
De acuerdo a datos del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), al cuarto trimestre de 2021, las cuatro entidades federativas con el mayor saldo de deuda pública fueron la Ciudad de México (94.5 mil mdp), Nuevo León (87.1 mil mdp), el Estado de México (59.2 mil mdp) y Chihuahua (51.9 mil mdp), así que en el año pasado nuestra entidad también figuró entre las más endeudadas.
Asimismo, durante el año pasado, los estados con mayor porcentaje de deuda con respecto a sus ingresos fueron Nuevo León (76.9%), Coahuila (75.0%) y Chihuahua (74.8%). Mientras que Chihuahua, Quintana Roo, Chiapas, Coahuila y Oaxaca tuvieron deudas subnacionales que representaron más del 5% de su PIB; en estados como Sinaloa, Baja California Sur, San Luis Potosí, Puebla y Campeche representan menos del 1%.
El IMCO señaló que la deuda es una herramienta financiera. Cuando ésta es usada para fines productivos y de forma sostenible, permite a los estados y municipios hacer inversiones que sirvan como catalizadores de crecimiento económico y competitividad. Sin embargo, alertó que puede convertirse en un problema cuando los gobiernos tienen que destinar gran parte de sus ingresos a pagar obligaciones financieras. Esto limita las capacidades de estados y municipios para proveer los bienes públicos y las inversiones que ayudan a generar, atraer y retener el talento y la inversión.
La deuda no es mala
En cuanto al tema de la deuda pública, el director general del Colegio de Negocios, Luis Arturo Gómez, en primera instancia señaló que la deuda no es mala, argumentando que tanto personas, como empresas y gobiernos requieren de financiamientos.
Dijo que si bien es cierto, el ideal sería no deberle nada a nadie, pero que la realidad es que es prácticamente imposible vivir sin financiamientos; aparte, expuso que si esa deuda se utiliza para proyectos de infraestructura, es decir, hacer carreteras, hospitales, escuelas, se considera como algo sumamente productivo que al final de cuentas ayuda al crecimiento económico y el desarrollo del país, estado o municipio.
“La deuda en sí no es mala, lo malo es tener una deuda demasiado grande. Las razones financieras que dictan la contabilidad dicen que las entidades no deben tener un endeudamiento mayor al 50% de los activos, en lo empresarial; en este caso, en lo gubernamental, la manera más correcta de medir el endeudamiento con respecto al Producto Interno Bruto (PIB)”, indicó el maestro en Finanzas.
En este sentido, explicó que no se puede juzgar a las entidades por el monto, sino que debe analizarse el endeudamiento contra lo que produce.
Ante ello, precisó que según datos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, a 2022, el endeudamiento de México con respecto al PIB es del 48.7%; al tiempo que recordó que en 2020 se registró el mayor endeudamiento a nivel nacional con respecto al PIB con un 51.3%, y en 2021 bajó a 50.5%.
A nivel estatal, para 2022, la entidad que mayor endeudamiento tiene en relación al Producto Interno Bruto Estatal (PIBE) es Quintana Roo con un 7%, en segundo lugar está Chihuahua con un 6.1% con respecto al PIBE, por lo que Gómez destacó que actualmente la deuda de los estados no representa un problema.
Sobre el incremento en la tasa de referencia por parte del Banco de México que ascendió a 10.5%, apuntó que esto indudablemente le “pega” a los créditos; y hablando de montos considerables para empresas y gobiernos, expuso que las instituciones financieras siempre les otorgan tasas fijas. “Sería muy torpe por parte de un municipio, estado o país, contratar un crédito a tasa variable”, añadió el experto en temas financieros.
