Salvador Carrejo Orozco, presidente de Coparmex Chihuahua manifestó que los resultados preliminares en las elecciones son una “tentación demasiado grande para tener prácticas autoritarias” en el ámbito federal; no obstante, indicó que será necesario esperar las primeras “señales” que envié este nuevo gobierno de Claudia Sheinbaum.
“En el desarrollo de la jornada electoral vemos luces y sombras. Luces en el sentido que hubo varias casillas y secciones con amplísima participación, con muchas personas esperando a pesar de las condiciones; pero en algunas otras no se mostró este ímpetu ciudadano. En el promedio, se apunta a que Chihuahua éste arriba del 50 % de participación, por debajo de lo que nosotros esperábamos”, señaló.
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Indicó que lamentablemente, se siguen presentando conductas irregulares en las elecciones, mismas que fueron detectadas a través del ejercicio de observación coordinado por Coparmex, y tuvieron que ver con compra de voto, acarreos, presencia de operadores de partidos políticos, “situaciones que no fueron muy distintas a lo que normalmente sucede en otras jornadas, pero no influyeron de manera determinante en la decisión a nivel nacional, a pesar de que dichas conductas son reprobables”.
Respecto a los resultados, Carrejo añadió que hay un mandato democrático contundente, incuestionable; sin embargo, expuso que les preocupa la vulnerabilidad del sistema democrático, porque si bien, este próximo Gobierno Federal tendrá una legitimidad incuestionable, desde el punto de vista electoral debe pensarse que la democracia no sólo son las elecciones, sino que tiene que ver con la distribución o concentración del poder.
“En este caso, creemos que la tentación es demasiado grande para tener prácticas autoritarias, ya que tendrá un poder prácticamente invencible, al menos como se ven los resultados preliminares en el Congreso y en el Senado. Esto pone condiciones –que ojalá no se den-, para decisiones unilaterales que no necesariamente sean las más sanas en el terreno democrático”, declaró.
No obstante, precisó que será necesario esperar las primeras “señales” que mande este nuevo gobierno de Claudia Sheinbaum, quien desde el Zócalo emitió un mensaje bastante conciliador, a decir de Carrejo, pero recordó que hace seis años el presidente López Obrador se expresó en un tono sumamente conciliador “y su gobierno ha sido todo lo contrario”.
En torno a la tardanza en la apertura de casillas electorales en el ámbito local, el entrevistado fue claro al señalar que algo se debe hacer, porque efectivamente, hubo muchas quejas por la tardanza, lo que finalmente repercute en el ánimo y la participación de los ciudadanos.
En este orden de ideas, detalló que son varios asuntos por analizar. “Mucho se ha comentado sobre la capacidad organizativa del Instituto Estatal Electoral, que algo tendrán que hacer para mejorar su desempeño; pero hay otras variables que debemos considerar como la responsabilidad de los funcionarios de casillas; entre otras cuestiones estructurales”, abundó.
