En la actualidad, el mercado de servicios funerarios ofrece diversas opciones, incluyendo paquetes con planes de pago semestrales, mensuales e incluso semanales, con precios congelados. Sin embargo, el costo de un sepelio fácilmente supera los 100 mil pesos.
Un sondeo realizado en funerarias de la ciudad reveló que en "Capillas de todas las Ánimas" se ofrecen servicios de cremación e inhumación con planes de pago semanal que oscilan entre 141 pesos durante un periodo de 192 semanas.
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Por su parte, Funerales Miranda también brinda múltiples opciones de pago, dependiendo del servicio elegido. En este establecimiento, los ataúdes de madera comienzan en 11 mil 500 pesos, mientras que los metálicos tienen un precio base de 19 mil pesos.
En todas las alternativas, es posible pagar en hasta 40 mensualidades, con cuotas que van desde 278 pesos como mínimo hasta más de 460 pesos, además de un anticipo que varía entre 400 y 600 pesos.
El precio promedio de los nichos económicos en diferentes negocios varía de 30 mil a 50 mil pesos, aunque los más lujosos pueden superar los 100 mil pesos. Optar por una fosa o panteón puede conllevar un gasto superior a los 50 mil pesos.
A estos costos se añaden los servicios de velación, que, aunque no siempre son solicitados, tienen un precio que varía entre 6 mil y 60 mil pesos. Además, el costo del traslado oscila entre 2 mil 500 y 5 mil pesos.
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Las flores son un elemento esencial en las tradiciones mexicanas, y actualmente, un arreglo o corona funeraria puede adquirirse a precios que oscilan entre 450 y 4 mil pesos, e incluso más. El costo de estos arreglos varía según la medida, tipo y cantidad de flores, así como por otros adornos característicos.
La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) señala que la muerte de un ser querido es un acontecimiento difícil tanto emocional como económicamente, por lo que recomienda tener en cuenta ciertas pautas.
Es fundamental conocer el contrato de adhesión del proveedor de servicios funerarios, que debe estar registrado ante la Profeco. Además, se debe solicitar por escrito los precios de los servicios y obtener el contrato correspondiente. Es aconsejable adquirir la urna o ataúd de manera personal y considerar los gastos adicionales que puedan surgir.
Profeco también exhorta a los consumidores a solicitar un comprobante de pago o factura que especifique las características de los productos o servicios contratados, ya que el prestador está obligado a respetar los precios de la publicidad que utiliza. Finalmente, recuerda que la planificación de servicios funerarios a futuro debe realizarse con la seguridad de que todo está en orden.