El 27.2 por ciento de la población ocupada en Chihuahua, se encontraba en pobreza laboral para el primer trimestre de 2023, lo que significa un aumento en relación al primer trimestre de 2022, cuando era del 26 por ciento.
Con el último resultado al tercer mes del año en curso, nuestra entidad se posicionó en el séptimo lugar en el contexto nacional con menor porcentaje de trabajadores en pobreza laboral. Baja California Sur tiene el menor índice en este sentido, con el 15.6%; en segundo lugar estuvo Baja California (18.7%) y después Nuevo León (23.3%).
Esto, según estadísticas de la Plataforma de Inteligencia Competitiva del Sector Privado (PICsp) con datos del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) y la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), donde se precisó que el ingreso laboral promedio en el estado de Chihuahua fue de 7 mil 765 en mujeres y de 9 mil 643 en hombres.
Mediante un comportamiento histórico presentado, se desprende que para el primer trimestre de 2019, el 27.2% de la población ocupada tenía una tendencia laboral a la pobreza en Chihuahua; y en el tercer trimestre de ese mismo año descendió al 25.7 por ciento.
En tanto que para el primer trimestre de 2020, este porcentaje bajó a 24.5%; sin embargo, en el tercer trimestre aumentó hasta a 28.3 por ciento. En el primer trimestre de 2021, se elevó al 29.7%, y en el tercer trimestre del año antepasado a 28.7%.
De enero a marzo de 2022, se trataba del 26% de la población ocupada, en el tercer trimestre del año pasado, fue del 24.2%; y en el cuarto trimestre del año pasado, disminuyó al 22.6% de la población.
En el primer trimestre de 2023, en el estado de Chihuahua la tasa de informalidad laboral fue de 34.1%, menor a la observada al cierre de 2022 (36.8%); no obstante, el porcentaje de la población es situación de pobreza laboral aumentó a 27.2% en comparación con el trimestre previo anterior (22.6%).
Es de mencionar que el Índice de la Tendencia Laboral de la Pobreza (ITLP) mide la proporción de colaboradores que ganan menos de la línea de bienestar, es decir, aquellos que no tienen suficientes ingresos para cubrir la canasta alimentaria.