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A pesar de la disminución del abasto de yeso y concreto, las producciones que van de la mano, como lo es la industria bloquera, continúan con material que muchas veces es de importación nacional.
“No podemos parar el trabajo, por lo que hemos conseguido el cemento de otros estados, por ejemplo ahora nos mandaron traer desde Torreón para que siguiéramos con la producción de blocks”, comentó uno de los dependientes del lugar.
Actualmente estos empleados trabajan las mismas jornadas que antes de la contingencia, e indican que se les vende la misma cantidad de producto que en fechas anteriores, por lo que no se han visto muy afectados.
En cuanto al abasto en ferreterías de la ciudad, los vendedores puntualizan que lo más difícil de conseguir en estos días es el yeso, pero en cuanto a los bultos de cemento, sí les siguen surtiendo los proveedores.
“Bultos sí les podemos vender, los que se necesiten, esos nos traen cada semana, o tenemos que ir nosotros por ellos, pero el yeso sí está detenido, ya es muy difícil conseguir, y si consigue uno está muy caro”, explicó un ferretero.
La venta de concreto prefabricado, con el que se construyen las losas y banquetas, entre otras estructuras, también se encuentra paralizada en la ciudad, al no ser considerada como esencial su producción.
Aunado a esto, múltiples vendedores del ramo de la construcción indican que en cuanto a los insumos que vienen de fuera, como lo son pegamentos y otros artículos de importación, han aumentado su precio en las últimas semanas.
“Hasta un 20% más caro nos venden los proveedores de Estados Unidos; lo que son algunos adhesivos, así como piezas hechas especialmente para algunos trabajos, los materiales de drenaje, entre otras cosas”.
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