El fenómeno de las monedas ‘raras’ que se ofrecen por miles, o a veces cientos de miles, sorprende a propios y extraños. Algunas se caracterizan por ser una edición limitada, o algún ejemplar con un error en su producción, la realidad es que existe un nicho muy específico para algunas de estas monedas, como el caso de una moneda de 10 pesos que la ofrecen por ¡50 mil pesos!
Antes de que corras a tu cajón para buscar una moneda de la misma denominación, hay que explicar que no se trata de cualquier ejemplar, sino de una bastante especial con muchos colecciones buscándola.
Una de estas monedas de 10 pesos que ha incrementado por mucho su valor es una edición conmemorativa que se lanzó en 2012 para celebrar 150 años de la Batalla de Puebla y en ella aparece el general Ignacio Zaragoza al centro con la leyenda que indica el aniversario de la celebración.
La edición más cotizada de esta moneda llega hasta los 50 mil pesos, pues contiene un error en la fecha e imagen del personaje. En lugar de 5 de mayo aparece 2 de mayo además de tener la imagen de Ignacio Zaragoza sin lentes.
Se cree que solo habrá unas 30 piezas ‘raras’ que salieron a circulación el primer día.
Esta moneda de 10 pesos que vale hasta 50 mil alcanzó a circular de forma limitada el primer día pero el Banco de México las retiró inmediatamente al percatarse del error. Según los aficionados a la numismática, se cree que unas 30 monedas siguieron circulando, de las cuales 12 ejemplares inmediatamente se fueron a manos de los coleccionistas y una de de estas monedas de 10 pesos se vendió en una subasta en 50 mil pesos.
No solo son aquellas que tienen alguna equivocación en su producción las que te pueden hacer ganar más dinero: existen también monedas de 10 pesos que, como a la vieja usanza, contienen algo de plata en su composición por lo que también es altamente perseguida. Se trata de los ejemplares que se acuñaron a principios de los 90, cuando se hizo la transición a los nuevos pesos, y que para lograr darles brillo a la parte central plateada de la moneda se incluyó, precisamente, cierta cantidad de dicho metal.
Publicado originalmente en El Sol de La Laguna