Se espera que la industria automotriz en la entidad vuelva a sus actividades en las próximas semanas, una vez que se estructure un plan de reapertura ante el anuncio de la entrada en vigor del T-MEC para el 1 de julio, como estrategia para reactivar la economía del país.
A través de un comunicado, la Secretaría de Economía de México informó que se encuentra trabajando de manera coordinada con Estados Unidos y Canadá para establecer los criterios, protocolos, lineamientos y condiciones que deberán cumplirse para permitir la reapertura de la actividad productiva automotriz.
El plan de reapertura para el sector automotriz en Norteamérica contemplará la diversidad de las regiones y localidades de los tres países, con diferentes condiciones sanitarias, respecto a la propagación del Covid-19. Estará basado en información científica y en las “mejores prácticas” que compartan las tres naciones.
Por lo que hasta su estructuración, la industria automotriz en México continuará acatando la orden de no actividad por parte del Consejo de Salubridad General.
De acuerdo con Francisco Santini, presidente del Consejo Coordinador Empresarial en Chihuahua, la entidad es la de mayor empleador en el sector automotriz, con cerca de 150 mil empleos directos. Más que otros estados de la República que tienen armadoras.
En el 2019, en el estado de Chihuahua se tenía registradas 256 empresas dedicadas a la fabricación de equipo de transporte, el 50% están calificadas como compañías grandes, un 17% medianas, el 10% pequeñas, y 23% micronegocios, de acuerdo con el Directorio Estadístico Nacional de Unidades Económicas (Denue), del Instituto Nacional de Estadística y Geografía.
En el país, cerca de cuatro millones de personas laboran en dicho sector industrial, lo que representaría una reactivación de la economía que llegaría a impulsar la recuperación de los bolsillos de los mexicanos, debido a su alcance geográfico y extensión de las cadenas de suministro.
La Secretaría de Economía explicó que dicho ejercicio colaborativo servirá de patrón para la reapertura de las demás actividades consideradas como no esenciales dentro del territorio mexicano, en el entendido de que al proteger la salud de la población se garantiza el retorno de las actividades productivas a un corto y mediano plazo.
El viernes 24 de abril, autoridades estadounidenses informaron que se prevé el 1 de julio como fecha para que el tratado T-MEC comience a aplicarse, con las mejoras significativas y enfoques modernizados de las normas de origen, acceso al mercado agrícola, propiedad intelectual, comercio digital, servicios financieros, trabajo y otros sectores.
En la industria automotriz, el T-MEC exigirá que el 75% de la composición de los vehículos sea originaria de la región, cuando con el Tlcan la tasa era de 62.5%, para que los autos pueden ser comercializados sin aranceles. También estipula que entre 40 y 45% debe ser fabricado por operarios que ganen al menos 16 dólares por hora.
“Con el tratado y con las acciones que estamos llevando a cabo para apoyar la economía familiar vamos a detener la caída de la economía, todo esto que se ha producido, se ha generado por la pandemia del coronavirus. Sí, va a caer la economía nacional, pero vamos rápido a mejorar”, explicó Andrés Manuel López Obrador, presidente de México, la semana pasada.
Sin embargo, de acuerdo con las declaraciones del director general de la AMIA, Fausto Cuevas, a un medio nacional, la entrada en funciones del tratado no podrá darse para el mes de julio, ante las dificultades actuales que enfrenta la industria automotriz en Estados Unidos debido al coronavirus Covid-19. Pues el sector solicitó que se aplace la entrada en vigor de las reglamentaciones uniformes de las reglas de origen de los vehículos, autopartes e insumos hasta el 1 de enero de 2021.
Cuevas también explicó que para la industria automotriz de México no es viable concluir las reglamentaciones en un periodo tan corto, puesto que aún se desconoce la forma en cómo se operará la normatividad del T-MEC tanto en México como en EU.
Al respecto de la situación en la entidad, con la permanencia de la planta de Ford Motor Company en la capital, esta casa editora buscó a Víctor Cruz, presidente de la AMDA en Chihuahua, sin que hasta el cierre de esta edición respondiera.
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