La muerte es fanática de la banda. Muchos han sido los cantantes de este género que en la cúspide de su carrera perdieron la vida trágicamente, pero ninguno ha dejado tantas teorías como Valentín Elizalde.
Hoy hace 16 años que “El Gallo de Oro” se preparaba para dar el que sería, sin saberlo aún, su último concierto antes de morir acribillado, en el palenque de la Expo-Feria en Reynosa, Tamaulipas.
En el aniversario de su muerte, recordamos cómo fue aquella madrugada en que la música mexicana cambiaría para siempre, y una de las principales líneas que explica qué pudo haber llevado a sus verdugos a jalar el gatillo.
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¿Qué edad tenía Valentín Elizalde?
Para quienes no estuvieron ahí en 2006 puede ser difícil comprender el alcance que tenía este artista: Valentín Elizalde era el exponente de la banda norteña para el mundo en la primera década de los 2000. Sus temas “Como me duele”, “Se parece a ti” y “El venadito” sonaban en todas las fiestas, sus 11 álbumes dejaban ganancias millonarias a su disquera.
A sus 27 años Valentín mantenía vivo el legado musical de su padre, Lalo “El Gallo Grande” Elizalde, quien murió cuando su hijo apenas tenía 13 años, en un trágico accidente que cortó abruptamente su carrera artística.
Fue en esta época dorada cuando recibió la invitación para participar en un palenque, evento que había realizado ya decenas de veces, en el territorio de Reynosa, Tamaulipas, al otro lado del país comparado con su natal Sinaloa.
¿Cómo murió Valentín Elizalde esa trágica noche?
Para muchos, el detalle que selló el destino de Valentín Elizalde ocurrió justo al principio de la presentación cuando abrió con uno de sus temas más conocidos “A mis enemigos”. Algo que se decía de este tema, uno de los favoritos del publico, es que entre sus versos esconde un mensaje de nada menos que Joaquín “El Chapo” Guzmán hacia sus rivales, Los Zetas, también conocidos como el Cártel del Golfo.
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"Siguen ladrando los perros
Señal que voy avanzando
Así lo dice el refrán
Para aquellos que andan hablando
De la gente que trabaja
Y que no andan vacilando”
El público aplaude, el concierto continúa con el cantante interpretando todos sus éxitos para deleite del público. Algunos dicen que es entonces que Elizalde recibe unas fotografías amenazantes desde el público, pero no le da importancia y continúa con la presentación, que terminó con él repitiendo la ahora infame canción.
Al final de la tocada el Gallo de Oro se tomó un momento para regalar fotos y autógrafos a sus admiradores, que como siempre se reunieron en las salidas para esperarlo. Para ese momento ya era de madrugada.
Luego de ver a los fans, abordó una camioneta Suburban de color negro que le esperaba en el estacionamiento, se subieron con él su representante Mario Mendoza Grajeda, el chofer Reynaldo Ballesteros y su primo Fausto “Tano” Elizalde. Ellos fueron quienes le acompañaron en sus últimos momentos.
Apenas comenzaban a avanzar cuando dos vehículos les cerraron el paso, de ellos se baja un grupo de hombres armados que sin mediar palabra descargaron dos rifles de asalto y una pistola sobre los ocupantes de la camioneta.
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Alrededor de 70 balazos hicieron trizas a la Suburban, Valentín Elizalde recibió ahí mismo impactos en las extremidades, el torso y la cabeza. Algunas versiones sostienen que el cantante también recibió un tiro de gracia, no dejando duda alguna que la órden de esa noche era acabar con su vida.
Murieron ahí también Mario Mendoza y Reynaldo Ballesteros, quedando como único sobreviviente Tano Elizalde, algo que levantaría sospechas y especulaciones años después de la tragedia.
¿Por qué mataron a Valentín Elizalde? El “Hummer” podría tener la respuesta
El pasado mes de octubre autoridades mexicanas anunciaron la órden de extradición para Jaime Gónzalez Durán, conocido como “El Hummer”, para ser juzgado en Estados Unidos por delitos de narcotráfico. Hasta ese momento permanecía en manos de la justicia mexicana.
González Durán sirvió como militar en el ejército mexicano desde 1991, particularmente con el Grupo Aeromóvil de Fuerzas Especializadas (GAFE), que se encargaba de combatir contra los crecientes grupos del narcotráfico en el país.
Para 1999 dejó el servicio para saltarse al otro lado de la ley, fundando junto a otros miembros de las fuerzas armadas el Cártel de los Zetas, uno de los más sanguinarios de la historia mexicana.
Dentro del Cártel el “Hummer”, cómo empezó a llamarse, mantenía control del tráfico de drogas hasta años tan recientes como el 2010, llegando a tener una fuerte rivalidad con el Cártel de Sinaloa y Joaquín “El Chapo Guzmán”.
Se rumora que la canción “A mis enemigos” ofendió a Los Zetas, particularmente a su líder, que dio la órden de matar a Valentín Elizalde luego del concierto en Reynosa, una de las zonas de México donde más fuerza habían adquirido.
Actualmente El Gallo de Oro continúa siendo uno de los artistas más escuchados del género de banda, sus canciones siguen sonando para recordarlo cada 25 de noviembre.
Publicada originalmente en El Sol de Hermosillo
