La aridez de la zona geográfica de Chihuahua obliga a una mayor profundidad de extracción de agua de pozos, y el recorrido de mayores distancias para llevar el ‘oro líquido’, necesario para la vida y supervivencia de sus habitantes, sin embargo, los mayores agresores son la falta de cultura del cuidado agua y la cultura de no pago de los usuarios del sistema de la red hidráulica, señaló Nicolás Holguín Rodríguez, director técnico de la Junta Centra de Agua y Saneamiento de Chihuahua.
“Siendo un desierto, tenemos escasez de agua, puesto que en esta franja en que nos ubicamos a nivel mundial, de los grandes desiertos del mundo, la precipitación pluvial, que nos refleja el abastecimiento del agua, a través de la infiltración misma del subsuelo, para recargar los acuíferos, es muy escasa la lluvia”, explicó sobre la cultura del desierto.
Por lo anterior, señaló que se está excavando más profundo, a mayor distancia, y la gente que son habitantes de estas zonas desérticas, no les interesa el esfuerzo que esto implica.
“Tal vez es falta de promover lo difícil que es conseguir u obtener el agua, así como también tener conocimiento de que la escasez del agua que tenemos no nos alcanza. Queremos vivir como si la tuviéramos en exceso. Desperdiciamos y derrochamos el agua, con el hecho de no cuidar las propias instalaciones con mangueras que tiran gotita tras gotita que sumadas representan metros cúbicos, es decir una medida de mil litros”.
A lo anterior se le añade que además de que no se cuida, se derrocha, y muchos usuarios no la pagan.
· Servicio de agua
“No es el agua lo que vendemos, es que cobramos por el servicio”, destacó el ingeniero Holguín, al explicar que el servicio lleva implícito el costo de energía eléctrica, personal que atiende todo lo humanamente para que llegue agua a la llave de las casas.
Por cada mil litros se cobra 7.50 pesos, con un costo de 5.50 pesos, y sólo dos pesos por los gastos propios de la administración como imprimir el papel, llevarlo a los domicilios, entre otros muchos procesos. Además, el consumo normal de agua por usuario (es decir, por recibo o familia), es de entre 15 a 20 metros cúbicos al mes.
Cuando se excede del consumo normal, se incrementa en relación al cobro, que si el usuario no detecta un mayor uso del vital líquido, sí puede corresponder a fugas, goteras o situaciones de derroche que contabilizan el uso del agua.
“La gente se preocupa más por pagar otro tipo de servicios o el plan del servicio telefónico, y a pesar de que el agua tiene un costo menor mensual, y que del servicio depende la forma de vida, no se da el valor real al agua.
· Calidad del agua
Hay presencia de arsénico y flúor en el agua, que de acuerdo con las normas internacionales, cuando hay exceso de éste último se presenta la fluorosis, que son términos que se aplican a manchas dentales, por ejemplo.
El especialista detalló que a cualquier profundidad de excavación para la extracción de agua hay diferentes minerales, sin embargo, en algunas zonas hay ‘lentes’ que son capas, que cuando se mezcla con el agua se altera la calidad de ésta.
Entre los municipios que presentan esta condición está Jiménez, Delicias, Meoqui, La Casita, en el municipio de Chihuahua. En todos lados hay arsénico, pero con menor cantidad de la que se registra en algunas zonas de esos lugares. En la ciudad de Chihuahua también hay, pero de muy bajo nivel.
· Fugas
“En el 35% de la red tenemos fuga de mil litros que surtimos de agua, 350 se van en fugas. Es un problema que tenemos y que se está trabajando, a través de equipos de alta tecnología, con la que se calcula a través de zonificación de sectores, que con un macromedidor se contabiliza el agua que entra a determinado fraccionamiento, y tiene que concordar con los micromedidores que tiene cada casa y tienen que ser sumas iguales”.
El director técnico de la JCAS mencionó que en la red hidráulica de la ciudad existen tuberías que datan de 1940, y que por su prolongado tiempo de servicio presentan fugas. “Pero también tenemos usuarios tramposos, ya no se va a poder dar vuelta al medidor; sin embargo, hay gente que deriva tomas antes del medidor y se lleva el agua no medida”, agregó.
El ingeniero Holguín destacó que la gran mayoría de los habitantes de las colonias populares son quienes están al corriente del pago.
