La apertura de centros religiosos en el estado, amplía el panorama para las celebraciones católicas de Cuaresma, que inician con el Miércoles de Ceniza; y permite las congregaciones evangélicas en cultos de alabanza y adoración.
La práctica de diferentes cultos en la ciudad de Chihuahua, retomaron sus actividades al adecuarse a la nueva realidad de profesión de fe: con cubrebocas, aforos reducidos y una nueva forma de evangelizar evitando las multitudes, pero enfocando estrategias digitales masivas para un mayor alcance.
La comunidad evangélica, desde la Confraternidad Ministerial Evangélica de Chihuahua, celebró la primera reunión ordinaria del año, que fue también, la primera presencial después de meses de suspensión de actividades impuesta por las autoridades, ya que por el semáforo rojo se habían llevado a cabo de manera virtual.
En la reunión, el presidente de la CMECH, el Pastor Bruno Escobar, dio un mensaje basado en la vida del profeta Elías, en el que exhortó a confiar plenamente en Dios durante tiempos difíciles, como el que se atraviesa por causa de la pandemia.
Así mismo, se recordó al Pastor Heriberto González, ex presidente de CMECH, quien fue víctima del Covid el pasado mes de noviembre.
Por parte de la Iglesia Católica, se aproxima la temporada de Cuaresma que iniciará el próximo 17 de febrero con la conmemoración del Miércoles de Ceniza, en el que tradicionalmente se imponía una cruz de ceniza sobre la frente o una pizca sobre la cabeza, para llamar a la conversión de los pecados.
El vocero de Arquidiócesis, Pbro. Gustavo Sánchez Prieto, hizo un llamado a la comunidad en general –además de la feligresía-, a respetar las indicaciones sanitarias, y a no ser ingenuos pretendiendo que con la semaforización más relajada se podría haber derrotado la pandemia.
“No seamos ingenuos. La pandemia no ha sido vencida. La vacunación es más propaganda que realidad. Necesitamos cuidarnos y cuidar a los demás, al tiempo que oramos insistentes por enfermos y familias, personal sanitario, así como por todos los difuntos”, afirmó.
Por su parte, en su mensaje de Cuaresma, el arzobispo de Chihuahua, Constancio Miranda Weckmann, expresó que en este tiempo de la pandemia causada por el Covid-19, “hemos aprendido a voltear hacia Dios pidiendo su auxilio. Nos ha permitido valorar la vida y cuidar la salud. Nos hemos abierto más a nuestros hermanos; todo esto y más, nos ayudará a vivir más intensamente este Tiempo de Cuaresma”, exhortó.
Respecto a los Testigos de Jehová, han establecido actividades de evangelización vía telefónica en lugar de las visitas domiciliarias; y han sustituido las publicaciones impresas por la edición en línea de El Atalaya. Además de haber reiterado que pese a la posibilidad de actividades presenciales de hasta el 30% de la capacidad de los recintos religiosos, han decidido permanecer en aislamiento voluntario, hasta llegar al color verde de la semaforización epidemiológica.