Durante el ultimo año, las enfermedades relacionadas con el alcoholismo cobraron 501 vidas en el estado, de acuerdo con la estadística de mortalidad del Instituto Nacional de Geografía y Estadística, INEGI.
Del total de fallecimientos, 367 están clasificadas como enfermedad alcohólica del hígado, es decir, un chihuahuense por día.
El resto, 134, fueron muertes por síndrome de abstinencia.
El INEGI muestra que las muertes relacionadas con el consumo excesivo de alcohol, han mantenido un promedio anual de entre 500 y 530 casos desde hace una década, sin embargo, la edad promedio de quienes mueren por esta causa, ha disminuido.
En 2010, mas del 78 por ciento de las muertes por alcoholismo, ocurrían en hombres de entre 42 y 67 años. Para 2015, el promedio oscilaba entre los 38 y 64 años, y en la actualidad, hay casos de personas menores de 30 años, que mueren a consecuencia de esta adicción.
*La falsa sensación de felicidad
El doctor Héctor Manuel Payán Valdez, urgenciólogo adscrito al Hospital General Regional (HGR) No. 1 IMSS "Morelos", explicó que beber alcohol produce una sensación de bienestar inmediata en las personas, desde la primera copa, sin embargo, sus efectos son adversos, por lo que "normalizar" el consumo de alcohol frecuente, es un signo de alerta.
Añadió que muchas personas que no tomaban bebidas embriagantes, comenzaron a hacerlo en loa últimos meses, para buscar un "falso escape" a la ansiedad generalizada por la pandemia del Covid-19, pero advirtió, el consumo excesivo de alcohol pueda llevar a la muerte.
El médico dijo que al día siguiente de que una persona consume alcohol, aparece malestar general en el cuerpo, conocido como resaca, y la pérdida de memoria; si el consumo de estas bebidas es continuo, con el tiempo se pueden desencadenar úlceras, problemas en el hígado, corazón y pulmones, además de alteraciones inmunológicas y también envejecimiento prematuro, advirtió.