La Fiscalía General del Estado envió en días pasados un listado de criminales y presuntos líderes del Cártel de Sinaloa en el estado de Chihuahua, para que el Gobierno de la República, con sus recursos y herramientas, colabore con las autoridades de seguridad para desactivarlos y reducir la incidencia criminal en la entidad.
Así lo explicó el fiscal general, César Augusto Peniche, quien detalló que estos criminales, que pertenecen a un grupo de familiares identificado como “Los Salgueiro” o “Gente Nueva”, se han convertido en los objetivos prioritarios tanto de la administración de Javier Corral Jurado como del Gobierno de la República, por los acontecimientos de violencia y sobre todo asesinatos de mandos de seguridad.
En los últimos meses, esta agrupación ha sido señalada de haber asesinado a tres mandos y un agente de la Fiscalía General del Estado en la zona sur del estado, siendo el último de ellos el comandante Luis Raúl Tarango, así como al agente antisecuestros Luis Fernando Ibarra Peña, quien pretendía capturar a uno de los criminales de dicha zona.
La organización criminal, de acuerdo a los archivos integrados por la Fiscalía General del Estado, es liderada por Ruperto S.N. el 37, quien es hermano de Noel S.N. el Flaco (detenido), quien era considerado mano derecha de Joaquín “Chapo” Guzmán, actualmente detenido en los Estados Unidos.
En las investigaciones y tras las órdenes de aprehensión que tiene la Fiscalía General, apuntan a que dicha asociación delictiva mantiene su zona de operación en la región sur del estado de Chihuahua y tiene entre sus filas a un sujeto plenamente identificado como Antonio Leonel C.M. el 300 o el Bin Laden, mismo que se encarga de la organización de los pistoleros en dicha región.
Entre el amplio listado también se encuentra Heriberto, Joel, Brian, Érick y Efrén, quienes mantienen el mismo apellido que la agrupación delictiva y son familiares de los principales fundadores de la misma, por lo que de acuerdo a las indagatorias continúan dirigiendo parte de dicha agrupación criminal.
Ruperto mantiene a varios familiares con los mismos apellidos laborando en la organización criminal, y son los que mantienen los mandos de la Gente Nueva en esa región, que comprende algunos puntos como Valle de Zaragoza, Parral, Coronado, Valle de Allende y algunos otros puntos aledaños, que pueden llegar hasta Durango y Sonora.
El principal cabecilla de la dinastía Salgueiro fue Noel “Flaco” Salgueiro Nevárez , quien se posicionó como la mano derecha de Joaquín Guzmán Loera, conocido como el Chapo, pues era el vínculo y su representante en algunas zonas del norte del país, como Chihuahua, Durango, Sonora y parte de Sinaloa.
Noel Salgueiro fue detenido en el año 2011 luego de que la Procuraduría General de la República (PGR) iniciara una campaña en su contra ofreciendo 15 millones de pesos para las personas que quisieran colaborar con información que diera a su captura, por lo cual fue detenido en el 5 de octubre a manos de la Sedena en Culiacán, Sinaloa.
Entre los cabecillas del Cártel de Sinaloa también se encontró Ruperto Salgueiro Nevárez, quien es apodado el 37 y sigue libre operando al brazo armado de la Gente Nueva en la zona sur del estado y que su mando alcanza hasta la ciudad de Chihuahua, donde se han identificado varios asesinos a sueldo que dicen trabajar para este personaje.
El 5 de enero de 2018 fueron detenidos dos personas identificadas como Mario el 70 y Alberto el Marm pertenecientes a un grupo delictivo de Sinaloa, quienes momentos antes intentaron privar de la vida a un joven de 25 años en la colonia Granjas del Valle, en la capital del estado, quienes dijeron trabajar para Ruperto Salgueiro.
Entre los operadores que han identificado en activo es un hombre apodado como el Visky, quien es uno de los miembros activos con mayor antigüedad y estuvo a punto de perder la vida en junio del año pasado durante un enfrentamiento en aquella región del estado.
Durante noviembre del 2020, elementos de la Fiscalía General del Estado llevaron a cabo la detención de César Ulises R.J., apodado el 309 o el Arlekín, en El Valle, luego de un operativo donde aseguraron a tres personas presuntamente integrantes del Cártel de Sinaloa.
Actualmente esta agrupación, según registros de la misma fiscalía, mantiene un conflicto con un grupo criminal de Jiménez, lo que ha generado varios enfrentamientos armados en Coronado, Jiménez, Parral y otros puntos aledaños, para acaparar el dominio de los espacios de la zona sur.
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