Cáncer, depresión y más pueden ocasionar vivir bajo torres de alta tensión

En pugna más de cien ciudadanos para tratar de lograr les sean vendidos terrenos ubicados bajo las torres de alta tensión que intersectan por la colonia Santa Cecilia y van a salir hasta calles de la colonia 20 de Noviembre, quienes poseen hasta una carta de posesión aseguran que los ejidatarios les venderán pues la CFE lleva años sin pagarles la renta de los espacios para las torres que se instalaron en sus predios, actualmente hasta medidores de luz y la zanja para el agua les hicieron llegar a quienes adquirieron un pedazo de estas tierras.

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Mientras unos están en desacuerdo otros buscan la oportunidad de hacerse de un terreno en estos espacios que por años no eran poblados debido a que se encuentran bajo las torres y cables de alta tensión y según las autoridades federales no es permitido construir viviendas y asentamientos humanos por el riesgo que esto representa.

Sobre las Torres de Alta Tensión se tiene documentado que son de alto riesgo al vivir cerca o bajo de estas pues los estudios sobre el tema de las antenas o torres que emiten frecuencias electromagnéticas se han relacionado en aumento a síntomas como dolores de cabeza, ansiedad, suicidios y depresiones, nauseas, fatiga y perdida del libido, además de presuntos aumentos de incidencia de ciertos tipos de cáncer, como la leucemia.

Incluso la norma oficial que rige estos espacios en México NRF-014-CFE y la Norma Oficial Mexicana NO-001SEDE-2005 exponen que estas líneas no deberán pasar sobre casas habitación, por lo que la franja libre varía entre los 32 y 42 metros.

Hoy un grupo de personas organizadas ha tomado la decisión de tratar de crear un patrimonio instalándose en cientos de metros cuadrados que pasan debajo de las torres de alta tensión a la altura de las colonias Vida Digna, Villas del Real, y Santa Cecilia donde incluso han pagado ya a empleados de la CFE para que les coloquen el murete y preparación para instalar la luz eléctrica, incluso decenas de ellos ya cuentan con el servicio con medidor y todo.

Actualmente existe una controversia de quien deberá poner orden en estos presuntos asentamientos humanos que pretenden instalarse en estas zonas según prohibidas por el riesgo que representan, ya que los centenares de ciudadanos que buscan la oportunidad ya marcaron sus metros y los cercaron con alambre de púas, incluso hay una persona que acaparo varios de estos y hasta los cerco con malla ciclónica.

También poco más abajo hacia el arroyo existe ya un grupo de asentamientos humanos con chozas de madera y lámina, mismos que precisamente por vivir en la incertidumbre de que un día los sacaran de ahí no hacen viviendas firmes y se han conformado en vivir solo en casas improvisadas.

Estas personas según denuncio un vecino del sector son abanderadas por un hombre de nombre Juan Enrique quien les ofrece el terreno y dice que solo hay que pagárselo a los ejidatarios ya que según ellos la CFE ya no les pago la renta y desean venderlos, pero según funcionarios de la dependencia federal estos derechos de vía se pagan en una sola exhibición.

A decir de “Agustín”, quien omitió sus demás generales para no verse afectado, los terrenos son vendidos de entre los 35 mil pesos hasta los 60 mil según la ubicación, y quien desarrolla este proyecto de poblar la zona les entrega una carta posesión para empoderarlos y les pide 8 mil pesos para que les dejen lista la instalación de murete y tubo galvanizado para la instalación de la energía eléctrica.

También existen quienes denuncian la falta de atención de las autoridades a lo que está ocurriendo como el señor Juan José Torres quien señala que esto solo será un fraude pues la ley no permite que se establezca asentamientos humanos en estos lugares, apunta al líder como alguien que les está defraudando pues eso está prohibido.

Al preguntar a “Agustín” sobre el posible fraude manifestó que ellos están confiados en que lograran asentarse en sus terrenos puesto que más arriba hacia la carretera 45 con más exactitud en la colonia aniversario hay casas construidas bajo las torres y quienes ahí viven lograron con el tiempo que se les permitiera vivir ahí.

Hasta el día de hoy ninguna autoridad competente se ha acercado para atender el problema y los paracaidistas avanzan poco a poco, precisamente el jueves se habría visto movilización policial y personal de ecología pero estos solo acudieron para imponer una sanción por no contar con permiso para construir de uno de los primeros paracaidistas que se dispuso a bardear su terreno pero nadie para el avance de esta invasión.

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