Tras las últimas detenciones de integrantes del Nuevo Cártel de Juárez, durante las audiencias que han presidido los jueces federales en la Ciudad de México se dio a conocer una alianza entre el capo más buscado, Rafael Caro Quintero, con miembros de La Línea, quienes incluso en octubre de 2019 sostuvieron una reunión en Buenaventura.
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De esto tuvo cuenta el activista Adrián LeBarón, quien presidió la última audiencia de José Alfredo alias Coman Lara y/o Pelonete, donde refirieron que habían sostenido un encuentro con Caro Quintero en Buenaventura, en el estado de Chihuahua, unas semanas antes de que ocurriera la masacre de la familia LeBarón.
“El juez cuando tuvimos la audiencia del Coman Lara dijo que días antes se habían reunido con Caro Quintero, estuvo en Buenaventura un mes antes, pactando con La Línea todo el relajo tuvo que ver que la llevaran de las patas, están dispuestos a matar a todo lo que se les atraviese”, comentó el activista.
Aunque tras su liberación en el 2018, Caro Quintero afirmó que se había separado del mundo del crimen organizado, un detenido reveló que el ahora considerado capo más importante para la DEA estuvo de paso por Chihuahua en el 2019 y que podría haber elaborado una alianza con el grupo rival del Cártel de Juárez, para combatir a Los Salazar.
En repetidas ocasiones se han colocado mantas que hacen referencia de que “el narco de narcos”, como era conocido, había regresado al negocio del crimen organizado, y lo habían responsabilizado del incremento de asesinatos en los estados de Chihuahua y Sonora, según una lona colgada el pasado mes de agosto en la capital.
Adrián LeBarón dijo que varios de los grupos criminales han hecho alianzas con grupos contrarios o grupos afines para buscar la disputa de su territorio, lo cual le han informado y mostrado en los organigramas que la propia SEIDO ha presentado en el avance de las investigaciones del caso de la masacre LeBarón.
Hasta el momento las autoridades en el estado de Chihuahua no han identificado la presencia de Rafael Caro Quintero en el estado, pero sí han visualizado la presencia de otros grupos armados provenientes de Sonora, como es la familia Bournes, quienes mantienen presencia en varios puntos de la sierra de Chihuahua y Sonora.
Dentro de la información de la Fiscalía General de la República, el presunto líder criminal había entrado en una fractura con el grupo del Cártel de Sinaloa, y por lo cual había hecho alianzas con varios grupos antagónicos, para disputar algunas plazas principalmente en contra del grupo Los Salazar.
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