La falta de educación y valores incide en que Chihuahua ocupe uno de los primeros lugares en violencia sexual, indicó la licenciada Karla Liliana Carrasco Sánchez, coordinadora de la Unidad Especializada en Delitos Sexuales y contra la Familia.

México ocupa uno de los primeros lugares a nivel mundial en violencia de género y ataques sexuales, Chihuahua desde el 2010 a la fecha ha estado oscilando entre el primero y el tercer lugar en ataques sexuales a hombres y mujeres.

La unidad se dedica a la investigación de casos donde las víctimas son varones, diariamente se reciben en promedio tres denuncias, de víctimas entre los 18 y 25 años de edad, muchos de ellos enganchados a través de redes sociales o que son drogados para atacarlos de manera sencilla.

El 80 por ciento de los casos que investigan la víctima es un niño o adolescente. “Cuando las víctimas son niños, los ataques sexuales se dan en el seno familiar”.

Recordó el caso de Fernando Zafiro Vecino, quien a través de la red social Facebook enganchó a dos adolescentes, a quienes mantuvo cautivos para después agredirlos sexualmente. A uno de los adolescentes lo contactó el 23 de julio de 2015 para ofrecerle trabajo en la sierra con un pago de 3 mil pesos, el empleo lo obtendría si salía de su casa sin dar aviso. Con engaños se lo llevó al municipio de Bocoyna, donde lo retuvo bajo amenazas de muerte y lo forzó a sostener relaciones sexuales. A la otra víctima la enganchó el 10 de enero, lo citó en el parque El Palomar y luego se lo llevó a un domicilio ubicado en la colonia La Minita, en el sur de la ciudad, donde lo violó.

Una de las madres interpuso el reporte de desaparición de su hijo, por lo que se empezó a investigar, dando como resultado que el atacante sexual les quitó las contraseñas de sus cuentas electrónicas de Facebook, con lo que las manipuló.

Karla Carrasco destacó que desgraciadamente al agresor sexual se le puede tener en la casa, ya sean padres, padrastros o algún familiar.

Destacó que todo empieza en casa, y desgraciadamente, los medios electrónicos han afectado los valores, “Recuerden que la educación inicia en casa y si nosotros estamos educados para respetar a la mujer por el hecho de ser mujer, ahí empezamos a respetar al prójimo”.

Así mismo dijo que seguimos viviendo en una cultura machista y que en ocasiones, las mujeres son quienes la fomentan.

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