El contingente feminista, conformado por más de 10 mil personas arribó a la Plaza del Ángel tras recorrer la avenida Universidad, trayecto en el que alzaron la voz por las mujeres desaparecidas y los derechos que faltan por garantizar hacia este género.
Al son de varias vivas como ‘Maru no es aliada, es privilegiada’, ‘vivas se las llevaron, vivas las queremos’, ‘señor, señora, no sea indiferente, se mata a las mujeres en la cara de la gente’, es como se congregaron en la plaza en mención.
A su arribo dejaron ver su inconformidad con el hecho de que rodearon con vallas metálicas los principales inmuebles gubernamentales, por lo que los gritos en contra del Gobierno se escucharon aún más fuerte.
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Igualmente, personas que transitaban por el centro de la ciudad se quedaron al filo de las banquetas para observar la llegada de las mujeres que salieron a las calles a exigir mayor seguridad y una vida libre de violencia.
Una parte del contingente se desplazó a la Plaza Hidalgo en donde se encuentra la Cruz de Clavos a fin de colocar las pancartas que portaban y las pesquisas de las mujeres que a la fecha continúan desaparecidas.
A su vez, se observan varios locales de la calle Libertad y aledaños a la Plaza de Armas cerrados a fin de salvaguardar sus comercios y productos que ofertan a la ciudadanía dado a que el año anterior la manifestación se extendió por ahí para llegar al Congreso del Estado.
Asimismo, se observa que los que no cerraron sus locales se mantienen a la expectativa de lo que ocurre en la marcha para actuar al respecto.
Renombran la Plaza Mayor como Plaza "Ni una más"
Por tercer año, renombraron la Plaza del Ángel como plaza "Ni una más"; la primera fue durante el gobierno de Patricio Martínez.
Poco antes de las 17:00 horas, llegaron al Centro Histórico de la ciudad los primeros marchantes que se sumaron al movimiento feminista.
Hubo quienes intentaron derribar las barreras metálicas que se colocaron alrededor de edificios como Palacio de Gobierno y Casa Chihuahua.
Al no poder lograrlo, procedieron a realizar pintas, en muchas de las cuales se evidenció el nombre de acosadores y violadores.
Ante la posibilidad de dispersión de gas lacrimógeno, se pidió a las presentes taparse las cara para evitar que sufran alguna consecuencia.
Con información de Karina Rodríguez