Con poca afluencia y hermetismo por parte del personal militar, este lunes 18 inició la aplicación de vacuna contra Covid-19 a personas entre 12 y 19 años de edad, quienes acudieron de manera reducida pero continua a las instalaciones del Hospital Militar, en esta ciudad de Chihuahua.
El acceso fue restringido por personal de la Secretaría de la Defensa Nacional, mientras que personal de la Secretaría de Bienestar, quienes coadyuvan en la campaña de vacunación, permanecían en la parte exterior, orientando a las personas que acudían a solicitar informes, y principalmente, preguntar qué tipo de comprobante de condición médica presentan los niños y jóvenes para poder recibir la vacuna.
Se estima que el tiempo total desde el ingreso a las instalaciones del Hospital Militar, la aplicación de la vacuna, el reposo y hasta la salida, demora alrededor de 18 minutos.
La entrada es libre y accesible, y solo en pocos momentos se formó una fila de ingreso, que no superaba las cinco personas.
Pablo Armando Lira, de 17 años, tiene diagnóstico de autismo, y fue llevado por su mamá para la aplicación de la vacuna contra Covid-19.
La mamá de Pablo mencionó que es muy necesaria la aplicación de la vacuna, especialmente a grupos con algún tipo de condición como la de Pablo Armando, y destacó el buen servicio del personal militar, que calificó como excelente, muy profesional y rápida. Atendieron con comprensión al joven, considerando su condición de autismo.
Fausto Chávez Martínez, acudió con su hijo adolescente Iván Chávez Portillo, quien es paciente de diabetes tipo 1, afirmó que se siente bien de recibir la vacuna contra Covid-19, sin embargo, reconoció presentar un poco de nervios por la reacción que pudiera ocurrir.
“Ya voy a poder tener una cierta libertad para salir a las calles más cuidado. Me sentía un poco presionado, pero sé que ya voy a estar bien con la vacuna y espero que funcione. Con el Covid y la diabetes no hay una relación directa, son otros problemas, pero hasta ahorita no me ha afectado en ninguna forma”, aseguró, al tiempo que compartió que las medidas especiales que ha implementado durante estos meses es el uso de tapabocas, sana distancia, no salir a lugares donde haya riesgo de contagio.
Refirió que está estudiando en el Colegio de Bachilleres donde solo acude presencialmente a los exámenes, y las clases son en línea.
Fausto, su padre, mencionó que esperaba que se demorara más la vacunación para jóvenes con alguna situación de vulnerabilidad, porque los otros grupos de edades, tardaron meses entre uno y otro para completar el esquema de vacunación.
“Gracias a Dios que ya están vacunando, porque hemos visto que en escuelas de gobierno y privadas, se han dado las contaminaciones por Covid. A las personas que no creen en la vacuna, o piensan que tiene un fin político; en estadísticas se ha visto que se ha bajado el índice de contagio con la aplicación de vacunas, y eso da credibilidad a la vacunación. Espero que la gente sí se anime y no cree falsas versiones”, finalizó.