A través del establecimiento de centros nocturnos, lotes de vehículos, negocios de diversos giros y desde luego distribución de droga en bares y antros dirigidos a clientela de alto poder adquisitivo, La Empresa comenzó hace cinco años a incursionar en la pugna por el control del submundo criminal en la ciudad de Chihuahua bajo el mando de René Gerardo S. G., alias el 300, de acuerdo con la información que ha recabado la Fiscalía General del Estado (FGE).
Al respecto, un exagente de la FGE cercano a las investigaciones contra grupos del crimen organizado en Chihuahua y que ahora forma parte de la Fiscalía General de la República (FGR), compartió a El Heraldo de Chihuahua que esta agrupación —uno de los muchos brazos del Cártel de Juárez— mantiene una pugna con un líder criminal del Cártel de Sinaloa identificado como Salvador Humberto S. V., a quien apodan el Verín, Señor de la V o el Chava. Disputa que ha desatado múltiples conflictos armados, incluyendo los recientes multihomicidios al exterior del bar Juana Gallo y frente al Cereso 1 de Aquiles Serdán.
Según abundó el especialista, el Verín ha mantenido el control de los negocios ilegales para el Cártel de Sinaloa en la capital desde la caída de Manuel Arzola (Don Meny) en 2018, a quien habría asesinado para apoderarse de la plaza. Precisó que dicha información trascendió en la detención de Manuel Villicaña Pacheco, alias el Largo Pol, quien fue asesinado el pasado 18 de julio en una emboscada frente al Centro de Reinserción Social (Cereso) de Aquiles Serdán, unos instantes después de haber sido liberado.
El entrevistado mencionó que durante el arresto en 2018 del Largo Pol, éste declaró ante un agente de la FGE que el Verín había asesinado a Don Meny y que él lo vengaría, pero este testimonio nunca fue integrado a la carpeta de investigación del homicidio de Manuel Arzola por presuntos intereses al interior de la corporación.
Según la versión con la que cuenta el exagente de la FGE entrevistado, el Verín fue informado de la liberación de Villicaña Pacheco y ordenó asesinarlo apenas pusiera un pie fuera de la prisión, adelantándose a que su rival intentara buscarlo para consumar la vendetta.
“Es claro que desde el interior del penal, incluso de las corporaciones, le informaron al Verín que iba a salir el Largo, sabían que iba buscar asesinar a Salvador por la muerte de Don Meny, pero le dieron santo y seña, pues su gente ya lo esperaba al exterior del penal para terminarlo”, compartió el ahora elemento de la FGR.
Tanto Don Meny, como el Verín, como el Largo son integrantes del Cártel de Sinaloa, pero a pesar de su relación criminal, las investigaciones de las autoridades estatales apuntan a que la historia se ha llenado entre traiciones y conflictos internos que ha terminado con bajas de sus grupos de operación en la ciudad, quedando al frente de estas agrupaciones Salvador Humberto.
En este contexto, es que tanto la FGE como la Dirección de Seguridad Pública Municipal (DSPM) han percibido mayor presencia de La Empresa, que pugna por establecer su emporio criminal en la zona de mayor plusvalía de la ciudad, es decir, el periférico De la Juventud y sus inmediaciones.
La FGE ha detectado en la capital negocios de operadores financieros de La Empresa o nuevos empresarios de Ciudad Juárez que aparentan ser lícitos, entre los que han detectado lotes de vehículos, centros nocturnos, inmobiliarios, entre otros.
La misma fuente explicó que uno de estos ejemplos se refleja en lo ocurrido con uno de los presuntos operadores del 300, quien además tenía una relación sentimental con la hermana del líder criminal. Se trata de un joven de 27 años identificado como Iván, alias el Frank, quien en agosto de 2021 fue atacado a balazos en el exterior de un gimnasio en la zona del periférico a bordo de un vehículo deportivo McLaren valuado en más de 3 millones de pesos.
La FGE ha notado que el grupo de La Empresa ha iniciado con la distribución de drogas al interior de los centros nocturnos en la ciudad de Chihuahua, principalmente en el corredor del periférico de la Juventud, donde existe una mayor presencia de centros nocturnos y donde existe un mayor poder adquisitivo. De acuerdo a los informes de la corporación, ha comenzado a distribuir cocaína que es una de las drogas que tiene un valor más elevado a comparación del cristal o drogas sintéticas. Prueba de ello son los aseguramientos de este narcótico en establecimientos como el Juana Gallo y otros de esta misma zona.
De acuerdo con el análisis de las corporaciones de seguridad y del exagente de la FGE esta situación sería una declaratoria de guerra para el Verín, lo que ha desatado diferentes enfrentamientos, no sólo en centros nocturnos, sino también en diferentes colonias y puntos donde localizan operación de agrupaciones contrarias.
Según la Fiscalía General del Estado, este líder del Cártel de Sinaloa nacido el 12 de abril de 1974, ha sido identificado como un generador de violencia desde 2010, con operaciones en Matamoros, Tamaulipas y otros puntos del país. Es reconocible por sus tatuajes, incluyendo una "V" en la espalda y una víbora en el brazo.
El Verín es originario de Camargo y comenzó a operar en la ciudad gracias al grupo identificado como familia Arzola. Se encargó de la distribución de drogas en la zona norte, respaldado por la organización de Los Salazar, uno de los principales operadores del Cártel de Sinaloa en Chihuahua, Sonora y Durango. Esta organización cuenta con encargados en diferentes comunidades y municipios del estado, reforzando su control en la región.
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En los informes actuales, se destaca que el Señor de la V estaba envuelto en una disputa interna dentro del cártel por el control del territorio de la capital, lo que resultó en varios homicidios, principalmente en el norte y sur de la ciudad. Su rival en esta disputa era Ramón S. V., alias el Doc, quien competía por la venta y distribución de drogas, especialmente cristal. Ramón falleció el 15 de diciembre debido a un paro cardiaco, según informes de sus familiares.
Desde 2014, se tienen registros de la presencia de Salvador Humberto en el estado, consolidándose en los últimos cinco años como un actor relevante en los organigramas criminales detectados por la fiscalía. Informes confidenciales ubican al Verín y su grupo en la capital, con casas de seguridad y otras operaciones delictivas. Entre sus operadores se encuentran individuos apodados como Valverde, el Alan, el Fox, el Vera y el Pato, quienes realizan actividades ilícitas como distribución, venta y vigilancia.
