El presidente municipal de Urique, Daniel Aarón Silva Figueroa, desairó a los habitantes de Cerocahui al no asistir a la ceremonia luctuosa de los sacerdotes Javier Campos Morales y Joaquín Mora Salazar, quienes fueron asesinados al interior del templo donde servían al pueblo en compañía de un guía de turistas Pedro Palma.
Aunque los sacerdotes fueron una pieza importante para el desarrollo de la comunidad de Cerocahui y eran queridos en otras poblaciones de San Rafael, Bahuichivo y Creel, el alcalde que representa a la población de Urique decidió no acompañar los cortejos fúnebres que se llevaron a cabo el pasado fin de semana.
Las actividades se realizaron desde el sábado en la ciudad de Chihuahua, posteriormente se trasladaron a Creel en el municipio de Bocoyna, y el domingo partieron los restos de ambos sacerdotes a varias comunidades para finalmente llegar a Cerocahui, donde estuvieron sirviendo por varios años consecutivos.
El presidente municipal no acompañó a la gobernadora María Eugenia Campos, al secretario de Seguridad Pública Gilberto Loya ni al delegado del Bienestar, Juan Carlos Loera, quienes fueron las autoridades que presenciaron la misa en honor a los dos sacerdotes que fueron asesinados por un presunto líder criminal.
Desde que se generó el múltiple homicidio en la iglesia de Cerocahui, y a pesar de que expulsaron a una familia, les quemaron la casa y privaron de la libertad a dos jóvenes, el representante municipal, se mantuvo ausente de estos hechos e incluso en sus pocas intervenciones, refirió que la corporación municipal atendió y que es la Fiscalía General de Estado, quienes deben resolver los hechos.
La familia desplazada por El Chueco, no han podido regresar a su domicilio ante el temor que mantiene por el grupo del líder criminal y el representante del Municipio de Chihuahua, no planteó condiciones para que puedan regresar a su domicilio, donde habrían sido expulsados por un conflicto con el mismo.
Ni el alcalde de Urique, ni el presidente Seccional de Cerocahui, estuvieron presentes en todos los cortejos fúnebres que se generaron el pasado fin de semana, incluso no han tenido acercamiento con los familiares de las víctimas o con los mismos pobladores que se encuentran lastimados por estos hechos.