Luis, Homero, Neto, están sentados en la banqueta, se deleitan con un plato de mole con pollo, arroz y frijolitos, es la comida que les dará sustento durante todo el día. Manos generosas de mujeres que prestan su servicio en el Comedor Parroquial de San Rafael Arcángel hacen posible el banquete.
El comedor tiene muchas carencias y la necesidad de las personas es enorme, por lo que este año con apoyo de cuatro estudiantes de la carrera de Desarrollo de Negocios especialidad en Mercadotecnia de la Universidad Tecnológica de Chihuahua iniciaron con la colecta de cobijas, calcetines y dulces para los beneficiarios del comedor, así como para los estudiantes de primaria de una escuela de bajos recursos que se ubica en la colonia San Rafael. Además de juguetes que pretenden regalarles a esos niños y a los hijos de los beneficiarios en esta Navidad.
Luna Zuilem Álvarez, Vanessa Domínguez, Fabián Portillo y Jennifer Chávez al conocer la iniciativa de las voluntarias del Comedor Parroquial decidieron apoyarlos y sobre todo hacer promoción de la colecta para Navidad.
CUMPLE 37 AÑOS DANDO PAN AL NECESITADO
El Comedor Parroquial de San Rafael Arcángel sobrevive gracias a las donaciones que recibe de personas de buen corazón, pero también al esfuerzo de las voluntarias bajo la coordinación de Soledad Ortiz, mejor conocida como Chole, quien llega desde las 7:00 horas para abrir las instalaciones ubicadas en la calle Eduardo Urueta, entre 23 y Donato Guerra, de inmediato pone las manos a la obra al poner los frijoles a cocer y adelantarle a los preparativos.
Cada día de la semana un equipo de voluntarias se encarga de preparar la comida, este martes, Leticia Corral es la coordinadora del equipo conformado Rosy, Chole y doña Ene, una mujer sumamente servicial de 82 años, quienes además se encarga de la limpieza en el templo parroquial, es catequista y servidora del altar.
El menú estuvo para chuparse los dedos gracias a la donación de pollo por parte del doctor Irigoyen, entre las cocineras se encargan de costear lo que hace falta para cada platillo, en este caso las tortillas, platos y vasos desechables, condimentos o algún otro acompañamiento.
A las 10:30 horas inicia el servicio de comida, por restricciones de la pandemia los beneficiarios no pueden ingresar al comedor, por ello quienes llevan su ración a casa deben de colocar sus recipientes en la entrada. Luego se les sirve a los que comen en el lugar, aunque en ocasiones los vecinos se enojan porque se sientan en sus banquetas.
Uno de los beneficiarios es papá soltero con tres hijos, la mamá los abandono, por lo que él se hace cargo de los niños y la comida que reciben es una gran ayuda. Llegan temprano para ayudar en la barrida de la banqueta para que quienes comen en la zona lo hagan en un lugar limpio.
La mayoría son varones, pero no faltan familias que lleguen por su ración de comida, quienes no tienen trabajo o son ambulantes. Hay indigentes que llegan todos los días, quienes saben que tienen un plato de comida caliente asegurado.
Neto y Homero son indigentes que a diario llegan e incluso comparten su comida con “El Ingeniero” un perro al que también alcanza la bondad de las voluntarias.
APOYEMOS AL COMEDOR PARA SU MILAGRO DE NAVIDAD
El Comedor Parroquial recibe algunos donativos de verdura por parte de la Central de Abastos, la empresa Bif les regala carne una vez por mes, una panadería les lleva pan de dulce que hacen rendir para el postre. En ocasiones la comida es escasa pero se la deben de ingeniar para preparar de 60 a 80 raciones diarias, su mayor necesidad es el gas para cocinar, pues gastan 500 pesos para 10 días.
Las voluntarias comentan que la cantidad de personas varía, en ocasiones a los beneficiarios les toca una porción extra. A nadie se le niega un plato de comida
En el comedor reciben ropa y medicamentos, pues se les brinda apoyo a quienes lo necesitan.
La colecta de dulces, calcetines y cobijas inició este martes y la meta es entregar el próximo 21 de diciembre.
Si usted desea donar y ser parte del milagro de Navidad para personas de muy escasos recursos puede llevar las donaciones al comedor de 8:00 a 12:00 horas de lunes a viernes, también con Leticia Corral a las Clínica de las Américas de 15:00 a 19:00 horas de lunes a sábado. Si desea más información acerca de las necesidades de este comedor puede comunicarse con Soledad Ortiz al 614-1625918 y al 614-2113442 con Leticia Corral También puede acudir a la oficina del templo parroquial ubicado en la calle 13 y Melchor Guaspe número 5213 en la colonia San Rafael.